El inesperado romance entre Nataly Umaña y Melfi en el reality de Canal RCN, La casa de los famosos, tomó por sorpresa a muchos. Desde el inicio de la competencia, se notaba un creciente acercamiento entre esta pareja de artistas, con coqueteos evidentes que generaron todo tipo de especulaciones, no solo entre los integrantes de la casa estudio, sino entre los televidentes y la entonces pareja sentimental de la actriz, Alejandro Estrada.
Inicialmente, se pensaba que todo formaba parte de una estrategia para añadir interés al juego, pero todo dio un giro inesperado cuando, en un desafío de actuación impuesto por el jefe, Nataly y Melfi se besaron apasionadamente.
A partir de ese momento, su romance se intensificó, llegando al punto en que las cámaras y sus compañeros ya no eran un obstáculo para sus demostraciones de afecto, incluyendo besos y abrazos. Incluso fueron sorprendidos varias veces bajo las cobijas.
La controversia alcanzó su punto máximo cuando el esposo de Nataly, también actor, ingresó a La casa de los famosos para visitarla en medio de la modalidad “congelados”, en la que todos los participantes deben quedarse quietos mientras sus familiares les hablan.
Durante el episodio del domingo 10 de marzo, Estrada ingresó y su drástica decisión dejó impactados a muchos espectadores. En vista del comportamiento de su esposa, le entregó el anillo de matrimonio, poniendo fin a su relación de 12 años frente a las cámaras.
“No sabes lo que viene pasando, has dicho que lo nuestro ya no tiene nada, está perfecto. Me vengo a hacer a un lado de tu vida, es una decisión tomada y un ciclo terminado. Retiro todas mis promesas”, fueron sus palabras.
Tras su visita, Nataly expresó que se sentía tranquila porque él merecía ser feliz, reconociendo que su relación se había desgastado con el paso de los años, tal como lo compartió la actriz en varias conversaciones con sus compañeros.
¿Nataly Umaña perdería los bienes que tenía con Alejandro Estada?
Entre las diversas reacciones que se desencadenaron dentro del reality, una de las más comentadas fue la de La Segura, quien, tras los acontecimientos, interrogó a Umaña sobre su futuro domicilio.
Ante esta situación, la Revista Vea contactó a Marcos Martínez, abogado procesalista egresado de la Universidad de Boyacá, quien explicó que la vía más expedita es iniciar un proceso de divorcio legal basado en el motivo número 1, relacionado con relaciones extramatrimoniales, según el artículo 154 del Código Civil.
Una vez iniciado este proceso, se aborda la disolución de la sociedad conyugal, considerando aspectos como las deudas existentes, los bienes disponibles, los susceptibles de liquidación y repartición, y aquellos que no lo son. El experto señala que los bienes heredados por alguno de los cónyuges no entran en esta repartición.
El profesional destaca que la persona infiel se encuentra en desventaja, ya que le resultará difícil llegar a un acuerdo de separación de bienes. De no llegar a un consenso con su expareja, podría enfrentar sanciones. Si se logra un acuerdo, el proceso finaliza ahí; de lo contrario, puede extenderse hasta 18 meses.
“La infidelidad probada conlleva una sanción que afectará económicamente a la parte infiel si el divorcio se tramita judicialmente”, asegura Martínez.
Por otro lado, la persona afectada, en este caso Alejandro Estrada, puede presentar pruebas ante un juez que evidencien los daños sufridos por los comportamientos de su esposa, y será el tribunal quien determine la compensación correspondiente.
“Todo esto debe demostrarse, es decir, debe argumentarse qué negocios se perdieron, qué contratos se vieron afectados, qué daños morales se sufrieron, etc.”, afirma.
Finalmente, el abogado concluye que, en la mayoría de los casos, la parte infiel no recibe el 50 % total de los bienes, sino una proporción menor.