La activista venezolana Ligia Bolívar, reconocida por su labor como defensora de Derechos Humanos y coordinadora de la iniciativa Alerta Venezuela, denunció que su visa de tipo M en Colombia fue recientemente rechazada por inadmisión, lo que ha derivado en que ahora se encuentre “en condición irregular”.
Tras cuatro años con el mismo estatus migratorio, la activista de nacionalidad venezolana afirma que esta situación ha puesto en peligro tanto su trabajo como su acceso a los servicios de salud del Estado colombiano, incluyendo su tratamiento oncológico.
“Desde hoy estoy en condición irregular, con riesgo de perder trabajo y EPS y, por tanto, tratamiento oncológico”, dijo Bolívar en su cuenta de X.
Este giro llegó cuando la entidad migratoria colombiana decidió que el trámite de renovación de su visa no era admisible, aduciendo que ella supuestamente desistió del mismo.
"Desde el año pasado advertimos los riesgos que enfrentaban las personas venezolanas que huyeron a Colombia en el contexto pre y postelectoral y la única respuesta ha sido INADMITIR sus solicitudes de visa y demoras en refugio”, dijo Bolívar.
La defensora asegura que, pese a mantener el mismo tipo de contrato laboral y residiendo legalmente en Colombia durante todo ese tiempo, le exigieron aplicar por un tipo de visa diferente, cuyos requisitos no puede cumplir, lo que califica como una manifestación de “inseguridad jurídica”.
“Esto no solo me afecta a mí. Significa que muchos que no tienen visibilidad o respaldo institucional quedan completamente en el aire”, le dijo Bolívar a El Espectador.
Más allá de su caso individual, Bolívar advierte que esta situación refleja un problema estructural más amplio que afecta a migrantes venezolanos en Colombia: los retrasos, la inadmisión de visas y la carencia de canales adecuados para regularizar su estatus.
La noticia llega en un momento en el que diferentes defensores y activistas venezolanos se enfrentan a problemáticas que vulneran su seguridad, no solo por este tipo de procesos, sino por los evidentes riesgos contra su vida, tras el atentado del pasado 13 de octubre contra Luis Alejando Peche y Yendri Velásquez en las calles de Bogotá.