El próximo 8 de marzo de 2026, se realizarán en Colombia las elecciones legislativas, en las que más de un millón de connacionales residentes en el exterior podrán participar para elegir a sus representantes en la Cámara. Así lo señaló Gloria Díaz, exconcejal de Bogotá (2016–2023), quien subrayó la importancia del voto de la diáspora en la definición del rumbo político, económico y social del país.

“Cada voto de la diáspora puede inclinar decisiones en circunscripciones concretas, fortalecer candidatos con agendas de derechos humanos, salud pública, educación y oportunidades para los jóvenes, y frenar el avance de proyectos regresivos”, afirmó Díaz, magíster en Desarrollo y especialista en Gestión Pública y Regional.

Recordó que los colombianos residentes en el exterior eligen dos representantes a la Cámara, cuyas curules fueron creadas para garantizar la participación política de quienes viven fuera del país. Estos congresistas, explicó, representan los intereses y desafíos de los connacionales que trabajan, estudian o desarrollan sus proyectos de vida en el extranjero. Su labor incluye la defensa de los derechos de los migrantes, la mejora en la atención consular, la promoción de políticas de retorno digno y el acceso a servicios de salud y educación.

Según Díaz, la abstención sigue siendo uno de los principales retos. Indicó que en 2022 cerca del 46 % de los ciudadanos habilitados para votar no acudieron a las urnas. “Esa falta de participación no es neutral: se traduce en políticas públicas que no reflejan la verdadera pluralidad del país”, señaló, citando datos del Observatorio de la Registraduría y la Misión de Observación Electoral (MOE).

La exconcejal destacó, además, el papel de los jóvenes, quienes representan una cuarta parte de la población colombiana. “He hablado con jóvenes que me dicen ‘la política no es para nosotros’. Mi respuesta siempre es la misma: la política también es para quien reclama seguridad, empleo digno, educación y salud mental”, expresó.

Díaz invitó a los colombianos en el exterior a verificar su inscripción en el censo electoral, contactar los consulados, organizar redes informativas, conocer las propuestas y participar activamente en los comicios. “Si estás fuera de Colombia, tu voto no es un gesto simbólico: es una herramienta real para cambiar el rumbo”, concluyó.