Lo que para una familia es una tragedia, la deformidad de una mujer por cuenta de cirugías estéticas en sitios y por personas no autorizadas, para la Fiscalía es una estafa en la modalidad de masa. Así quedó la imputación de cargos que hicieron en contra de dos cabecillas de una red criminal en Medellín.
Se trata de Yarleny Mosquera Aguirre y Elizabeth Rojas Tobón, que fueron presentadas ante jueces de control de garantías en el marco de una investigación que adelantó la Fiscalía y en la que advierten cómo, durante años, se movieron por la ciudad de Medellín con un centro de estética improvisado, ofreciendo cirugías a bajo costo.
“Los elementos materiales probatorios indican que Mosquera Aguirre sería la encargada de realizar las cirugías estéticas. Al parecer, se presentaba como médica sin tener título, conocimientos o certificaciones en el área de la salud. Entre tanto, Rojas Tobón es señalada de asumir todos los asuntos comerciales, captar clientes y recibir los pagos por los tratamientos en su cuenta bancaria”, advierte el reporte del ente acusador.
Las dos mujeres fueron investigadas y judicializadas, como ocurrió con otras tres que hace dos meses fueron capturadas, supuestas responsables de integrar la red de falsas cirujanas que dejaban en riesgo la vida de mujeres en centros de estética a través de un procedimiento conocido como lipolisis láser con transferencia glútea.
“Las víctimas eran atraídas por publicaciones realizadas en redes sociales, en las que se ofrecía a bajo costo un tratamiento denominado ‘lipólisis láser con transferencia glútea’. 55 mujeres que creyeron en esta práctica fueron sometidas a intervenciones quirúrgicas. Algunas adquirieron una bacteria no tuberculosa que les causó deformidades físicas y limitaciones funcionales permanentes”, dijo la Fiscalía.
La Fiscalía presentó los elementos de prueba necesarios que ubicaban a las dos mujeres en las salas de cirugía y como responsables de los procedimientos con víctimas afectadas por graves deformidades y una tragedia familiar, que la justicia redujo a una estafa.
“Elizabeth Rojas Tobón se allanó a los cargos; mientras que Mosquera Aguirre aceptó los delitos de estafa agravada en modalidad masa y lesiones personales dolosas. Por disposición de una juez de control de garantías, las dos mujeres deberán cumplir medida de aseguramiento en centro carcelario, para tal efecto emitió orden de captura en su contra”, señala la Fiscalía.
La investigación fue efectiva, gracias a las denuncias de las víctimas que reconocieron a las responsables de ofrecer por redes sociales los servicios de cirugía estética, a través del procedimiento de lipolisis láser con transferencia glútea, justamente la causa de las deformidades.