La crisis por la escasez de medicamentos tan esenciales como la insulina se ha agudizado en el último mes en Colombia. Así lo denuncian varias entidades, entre ellas la Fundación Voces Diabetes Colombia, organización que trabaja por los derechos de los colombianos con esta enfermedad, que de acuerdo con la Cuenta de Alto Costo suman 1′676.885 personas en todo el país.

De ese total, por lo menos el 16,94 por ciento, todos ellos pacientes con diabetes tipo 1, requieren de un tratamiento con insulina para vivir, un medicamento que al que miles de enfermos les está costando acceder. De hecho, el pasado 15 de marzo, el Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima) divulgó, precisamente, información en el sentido de que fármacos como la insulina y el acetaminofén estaban en riesgo de no seguir llegando a las droguerías.

los problemas persisten en materia de distribución y dispensación de varias marcas de insulinas, como Lispro, Degludec y Lantus. | Foto: Getty Images

En ese momento, el Invima presentó un listado de 12 medicinas que podrían agotarse en las farmacias y otras 25 que están desabastecidas.

Entre los medicamentos con novedad —que están escasos o no disponibles— se mencionaron xanax 0,75 mg, clozapina 25 mg, fluoxetina 20 mg, escitalopram 10 mg, quetiapina 25 mg y 100 mg, y dulokem 30 mg.

Sin embargo, la semana pasada el Ministerio de Salud confirmó que, junto al Invima y la Superintendencia de Salud, han venido realizando un seguimiento de disponibilidad de este producto, un proceso que se da en el marco del sistema de monitoreo de abastecimiento. 

Tras ese monitoreo, el ministerio a través de un comunicado envió un parte de tranquilidad a la ciudadanía y aclaró que, si bien entre noviembre de 2023 y febrero de 2024 hubo novedades de disponibilidad, a la fecha (finales de marzo) la oferta se encontraba normalizada.

Sigue la escasez

Pero otra es la realidad que a diario viven miles de pacientes con diabetes en el país. Según Montañez los problemas persisten en materia de distribución y dispensación de varias marcas de insulinas, como Lispro, Degludec y Lantus. 

El riesgo es muy alto en perspectiva el riesgo es para 17 mil pacientes con diabetes tipo 1, personas que son todas insulinodependientes para poder vivir.

La historia es la misma cuando se trata de acceder a medicamentos orales para el tratamiento de la enfermedad como Sitagliptina, Galvusmet y Jardiance. Se trata de medicamentos “que en este momento están siendo difíciles de conseguir”, comentó Érika Montañez, directora de la la Fundación Voces Diabetes Colombia. Y no solo en droguerías particulares, sino a través de los canales institucionales, especialmente en las regiones más apartadas del país.

En agosto pasado, asegura Montañez, la Fundación Voces Diabetes Colombia publicó alertas de desabastecimiento “porque la propia industria nos comunicó problemas que estaba teniendo con tres insulinas, especialmente una muy vendida en Colombia, Degludec; también Victoza y Tresiba. Afirmaron que en noviembre de 2023 se regularía de nuevo el abastecimiento. Y en octubre quisimos hablar con el viceministro de salud, Jaime Urrego, para que explicara qué pasaba, pues había casos en los que se reportaba que el operador farmacéutico no entregaba los medicamentos. Pero, hasta ahora Minsalud no nos ha dado un espacio”.

Para la vocera, el riesgo es muy alto en perspectiva el riesgo es para 17 mil pacientes con diabetes tipo 1, personas que son todas insulinodependientes para poder vivir. Y en la diabetes tipo 2, cuyos pacientes son insulinorequirientes el 40 por ciento utiliza insulina. Estamos hablando de 3,8 millones de personas. El riesgo es muy alto.