Hoy en día, pese a los avances tecnológicos, cada vez más personas dependen de los cajeros automáticos para realizar transacciones rápidas y retirar dinero en efectivo. Sin embargo, estas máquinas despiertan el interés de los delincuentes, quienes utilizan diversas técnicas para engañar a sus víctimas.

Por ejemplo, algunos expertos advierten que no todos los puntos de retiro son igual de seguros. Por ejemplo, en el caso de los cajeros ubicados en plena vía pública representan un riesgo considerable para los usuarios, tanto en términos de seguridad física como digital.

Los delincuentes emplean diversas técnicas para robar los cajeros automáticos. | Foto: Getty Images

De acuerdo con el sitio web Computer Hoy, el verdadero riesgo se concentra en aquellos que operan de manera independiente y no están anexos a una sucursal bancaria o a un establecimiento vigilado.

Estos equipos suelen carecer de supervisión constante y de sistemas de seguridad adecuados, lo que los convierte en objetivos fáciles para los delincuentes. Al tener menos control y mantenimiento, son más propensos a ser manipulados con dispositivos falsos o alterados con herramientas que permiten robar información y clonar tarjetas sin que el usuario lo note.

Aunque las técnicas varían, una de las más preocupantes es el skimming, que consiste en la instalación de un dispositivo electrónico en el lector de tarjetas de los cajeros. Ese dispositivo, casi imperceptible, extrae los datos de la banda magnética de la tarjeta durante la operación. Para hacerse con el PIN, los delincuentes instalan cámaras escondidas o sustituyen el teclado por uno falso que registra las teclas pulsadas, todo sin que la víctima se percate.

Los delincuentes aprovechan la tecnología para alterar los cajeros automáticos. | Foto: Getty Images

¿Cómo protegerse frente al riesgo de fraude?

  • Lo primero es que al introducir el PIN, debe cubrir el teclado con la mano para evitar que microcámaras registren la clave.
  • Revisar con regularidad los movimientos bancarios ayuda a detectar operaciones sospechosas y reducir las pérdidas.
  • Es preferible usar cajeros dentro de sucursales o centros comerciales, que ofrecen mayor vigilancia y menor riesgo de manipulación.