De Danilo González

En lo concerniente al artículo 'De cazador a cazado' insertado en la revista SEMANA, edición #1.126 (diciembre 1 a 8 de 2003), yo, Danilo Alfonso González Gil, me permito solicitar se publique en la sección correspondiente esta carta, con lo cual consideraré satisfecho el derecho de réplica.

Mi retiro de la Policía Nacional, fue por voluntad propia, sin presiones y debido a problemas familiares. Es cierto que quedé con muchos enemigos y de allí que mi nombre sea objeto de las más difamantes calumnias e incluso injurias. Mi nombre, por razones obvias puede causar escozor en el "bajo mundo". Pero nunca hará temblar a las personas de bien y eso lo pueden corroborar más de 87 familias agradecidas, ellas sí, por el igual número de personas que rescaté de las garras del secuestro durante mi permanencia de año y medio en el Gaula de la Policía Nacional en Bogotá. Actualmente, como pensionado de la Policía Nacional, todos los meses hago cola para cobrar mi mesada mensual, hago cola para requerir los servicios médicos para mi familia y para mí y el resto del tiempo me dedico a la ganadería y a la agricultura que aprendí de mis antepasados, como bien lo saben los campesinos de la región donde desarrollo esas actividades.

Danilo Alfonso González Gil, siempre será una "presa difícil de cazar" para los terroristas enemigos de Colombia a quienes combatí.

El día, que tan solo un agente de la Policía Nacional me requiera, estaré listo a responder por mis actos.

Danilo Alfonso González Gil

Bogotá