Home

Deportes

Artículo

Gabriel Camargo. | Foto: El Rincón del Vinotinto

deportes

Gabriel Camargo, por obligación, se retractó de tildar al fútbol femenino como “cultivo de lesbianismo”

Además de las disculpas se confirmó que el Tolima femenino vuelve a la competencia profesional en 2022.

1 de septiembre de 2021

La Corte Constitucional protegió los derechos fundamentales de las futbolistas, considerando que el máximo accionista del Deportes Tolima, Gabriel Camargo, incurrió en actos de discriminación que reproducen la violencia estructural contras las mujeres en razón a su género u orientación sexual. Por eso, sentenció que tenía que retractarse de las polémicas declaraciones entregadas el 20 de diciembre de 2018 en rueda de prensa y un mes después de dictada la sentencia de la Corte Constitucional, el dirigente cumplió.

Para la época, Camargo aseguró sobre el balompié de ellas: “Eso anda mal. Eso no da nada, ni económicamente, ni nada de esas cosas. Aparte de los problemas que dan las mujeres. Son más ‘tomatrago’ que los hombres. Pregúntenle a los del Huila cómo están de arrepentidos de haber sacado el título y haber invertido tanta plata al equipo. Y fuera de eso, les recuerdo, es un caldo de cultivo del lesbianismo tremendo”, dijo Camargo en su momento.

Este miércoles a las 11 de la mañana, en la sede del Club Campestre de Ibagué, cumplió con la obligación que le impuso la Corte Constitucional: “En diciembre de 2018 realicé unas declaraciones sobre el fútbol femenino y sus jugadoras. Hoy, después de tres años me retracto nuevamente de las afirmaciones que pudieron ofender a quienes hacen parte de la práctica del fútbol femenino”, inició Camargo y prosiguió: “Nuestra institución Club Deportes Tolima siempre ha respetado los derechos laborales, personales y fundamentales de las jugadoras que han hecho parte del equipo femenino, que a través de sus directivos y cuerpo técnico se ha hecho acto de discriminación alguno por su conducta social, sexual, de raza o cualquier otra índole. Con lo anterior me retracto de las opiniones generalizadas”.

Con la obligación, demostró compromiso dando a conocer el programa de diversidad, equidad e inclusión del Deportes Tolima, en el cual esperan darle más valor a la rama femenina: “El programa esta enmarcado dentro de las disposiciones del código de ética de la FIFA, artículo 22 y código 13 del código disciplinario de la FIFA y el código 92 disciplinario de la Federación Colombiana de Fútbol sobre la equidad de género, inclusión y promoción de la diversidad. Así mismo, este programa responderá a las preocupaciones que han manifestado, como son la necesidad del fomento de la lucha contra la discriminación y ofrecer a las personas que practican deporte ambiente de equidad, seguridad y confianza”, aseguró

En la rueda de prensa estuvieron presentes jugadoras del Deportes Tolima Femenino, el técnico John Agudelo, medios de comunicación, la viceministra del Deporte en Colombia, Lina María Barrera, y Gheidy Gallo Santos, consejera presidencial para la Equidad de la Mujer. Ante ellos, el dirigente se mostró arrepentido: “Nunca fue mi intención agredir a las futbolistas y menos pasar por encima de sus derechos fundamentales de igualdad, no discriminación, dignidad, honra y buen nombre. Presento mis disculpas públicas a las personas que se hayan sentido heridas con mis opiniones”, concluyó en sus disculpas.

La buena noticia de la rueda de prensa tuvo que ver con la confirmación del regreso del Deportes Tolima al fútbol femenino para la Liga BetPlay femenina del año 2022. La última participación del cuadro pijao en esta rama se dio en el año 2019. El equipo será dirigido por el profesor John Agudelo Hernández, que ya trabaja con la plantilla. Desde el club vinotinto y oro se hizo un llamado a las empresas privadas como patrocinadores, los medios de comunicación y las entidades gubernamentales para que el fútbol femenino tenga más importancia: “No podemos trabajar como cadenas sueltas, necesitamos estar cohesionados con un mismo objetivo”, dijo el gerente administrativo del club, Germán Kairuz.