| Foto: INGIMAGE.

FORMACIÓN

¿Educación inicial o atención integral de calidad?

Es una ironía que en el sistema educativo colombiano la mayor deserción se presente en preescolar y el año que más se reprueba sea primero.

9 de septiembre de 2015

Cerca de 7.800 niños están abandonado el sistema educativo cada año cuando apenas empiezan. La tasa de deserción de transición, el primer grado obligatorio de la educación en Colombia, es del 3.25 por ciento, frente al 2.83 por ciento que desertan en los siguientes grados de primaria juntos. Además, el año que más se reprueba es primero de primaria: casi 20.500 niños lo pierden cada año.

Así lo explicó Ana María Rodríguez, directora de la División de Primera Infancia del Ministerio de Educación Nacional, en el V Encuentro de Reduca, una red de organizaciones de la sociedad civil de catorce países latinoamericanos, preocupadas por la educación. Allí, expertos internacionales y líderes empresariales como los que congrega Empresarios por la Educación, enfatizaron en los retos que existen para la educación inicial hoy en día cuando la prioridad ya no es solamente que ésta haga parte de la agenda, sino ir más allá y dialogar sobre calidad, sobre cómo atender y entender a cada niño y cada niña en la diferencia, con el reto, además, de articular la atención a la primera infancia a otros sectores para hacerla verdaderamente integral y al resto del sistema educativo.

Según la funcionaria, los pequeños reprueban primero porque llegan muy temprano, por la falta de cobertura para transición. En cuanto a la deserción, dice que en  el país se cuenta con pocos educadores que comprendan el desarrollo infantil y lo que se requiere en cada etapa.

Articulación pedagógica, infraestructura y edad de entrada son los aspectos claves para trabajar alrededor de ambas problemáticas. “Es un tema que enfrentamos con la guía de trabajo que venimos adelantando ‘Todos Listos’, una estrategia de acompañamiento a estudiantes y familiares para que pasen de un momento a otro tranquilamente. Les daremos herramientas a profes, directivos y familias para que acompañen a sus niños más pequeños en esos momentos de tránsito entre un nivel y otro. Estamos en un piloto con quince municipios y la meta es escalarlo al ámbitonacional con los ajustes que nos sugiera el piloto”.

Sin embargo, para el chileno Mario Waissbluth Subelman, presidente de la Fundación Educación 2020, el reto es la cualificación de los maestros porque para él, una cobertura pre-escolar de baja calidad hace más daño que bien. “Tenemos que tener educadores de párvulos de clase mundial, especialmente en los sectores más vulnerados, pero tenemos profesores mal seleccionados, mal remunerados y mal formados. América Latina, por todos sus indicadores, es el patio trasero del hemisferio occidental. Tampoco es casualidad que los indicadores de inequidad de ingresos sean tan vergonzosos como los educativos".

Otros retos de la educación inicial en América Latina están relacionados con entender a los niños como sujetos de derechos y tener una visión integradora. David Calderón, co-fundador y director de Mexicanos Primero, una iniciativa ciudadana de incidencia en política pública y corresponsabilidad social en educación, lo resume en los cinco desafíos siguientes.

Cinco retos de la educación inicial  

1.    Visibilizar el desarrollo infantil: “En mi país desarrollamos una cartilla para que los padres puedan revisar semana por semana, no es un diagnóstico médico pero le da pistas sobre el desarrollo del niño”.

2.    Encontrarle un hogar institucional a la primera infancia: “Que sea el trabajo de tiempo completo de alguien”.

3.    Entender que se necesita inversión:
“No porque sean chiquitos necesitan poquito”

4.    Articulación y visibilizar organizaciones de sociedad civil: “Hay mucha energía social dispersa, anónima, y hay que recuperar esas experiencias”

5.    Poner a los padres en el centro:
“El Estado no puede ser el padre”.

Ana María Rodríguez concluye que, entre los retos en los que avanza Colombia, están la atención integral, con el programa ‘De Cero a Siempre’, y en la articulación institucional. “Tenemos una comisión intersectorial para atención integral de la primera infancia. Hay una persona sentada en la Presidencia que nos persigue a todos los sectores y nos coordina de forma permanente. Es difícil, nos falta trabajo en los territorios, pero hemos avanzado”.

Actualmente se adelanta un Proyecto de Ley de Atención Integral a la Primera Infancia que pretende convertir la estrategia ‘De Cero a Siempre’ en una política de Estado, otro de los retos que señaló Waissbluth Subelman: “Pasar de programas a políticas públicas que no dependan del gobierno de turno”.

La importancia de la educación inicial

Según Ana María Rodríguez, la educación inicial está comprendida por todas aquellas aproximaciones pedagógicas intencionadas que desarrollan todos los actores y agentes que trabajan con niños menores de seis años. El objetivo es que los niños generen interacciones significativas y vínculos afectivos y que desarrollen el máximo de sus capacidades y aprendizajes que les sirvan para las fases posteriores de educación formal.

Andrea Bergamaschi, especialista en Educación del Banco Interamericano de Desarrollo, explica que la etapa entre los cero y los seis años es la más importante del desarrollo neurológico y cerebral. Es un periodo en el que “consolidamos las habilidades para seguir aprendiendo a lo largo de la vida y para la trayectoria escolar”.