EDUCACIÓN

Reapertura de colegios: ¿es realmente viable que se inicie en septiembre?

En septiembre se inician los planes pilotos para volver a las aulas. Sin embargo, son muchas las dudas sobre un retorno seguro. Además, se han presentado contradicciones en declaraciones del Gobierno y entes territoriales. La confusión reina entre padres y directivos.

31 de agosto de 2020

El Gobierno anunció que en septiembre se dará inicio a los primeros pilotos de reapertura de colegios en Colombia. Al igual que en otras ocasiones que se anunció un eventual regreso a clases, la noticia causó controversia. Una parte importante de padres y docentes coincide en que no existen las garantías para que los estudiantes vuelvan a las aulas.

Lo único cierto es que mientras no aparezca una vacuna, lo que tardará más de un año según prevén varios expertos, Colombia tendrá que aprender a manejar y convivir con la pandemia. Por esta razón, es crucial que vuelvan los colegios dado que la vida cotidiana depende en gran medida de que los niños vayan a clase mientras los padres trabajan.

“Los niños ya no aguantan más sin ir al colegio. Le rogamos que puedan volver a clases”, le dijo Nancy Carrizosa, una de las tantas madres preocupadas en el país, al presidente Iván Duque y a la ministra de Educación, María Victoria Angulo, durante uno de los programas ‘Prevención y Acción’ de esta semana.

"En septiembre se van a dar unos primeros pilotos en los municipios que son no covid, que no tienen afectación y que nos permiten poner en juego todos estos protocolos y un trabajo en comunidad, allí será clave la decisión de la familia", respondió la ministra, quien explicó que será la evolución de la pandemia la que permita ir dando esos pasos para dar una reapertura gradual mediante el modelo de alternancia o semipresencialidad.

De los 1122 municipios de todo el país, solo 116 se reportan como no-covid y otros 310 tienen baja afectación. En estos lugares, muchos en zonas rurales con deficiencias de infraestructura en las instituciones, se iniciarían los planes pilotos. El resto de municipios tienen afectación moderada (290) o alta (406).

¿Pero de qué depende que en estos municipios se inicien los planes piloto?. Cada ente territorial deberá hacer una caracterización del colegio en el que aplicará al plan, es decir, identificar y concertar el regreso a clases con toda la comunidad educativa, analizar las condiciones de infraestructura de la institución para así proponer cómo funcionará la alternancia, la cual básicamente consiste en establecer grupos pequeños de estudiantes para cumplir las medidas de bioseguridad y alternar las clases presenciales con las virtuales para evitar conglomeraciones en los colegios.

Dentro de las instituciones se deben garantizar dos metros entre alumnos y el uso del tapabocas será obligatorio. Cada municipio y colegio ajustará esta alternancia a sus necesidades particulares, para así pasar una propuesta al Ministerio de Educación y Salud que son los encargados de aprobarlo o no.

Aunque en el papel la ecuación para reabrir los colegios parece clara, en la práctica es mucho más difícil. Para poder cumplir con esos protocolos de bioseguridad los colegios, tanto públicos como privados, deben hacer inversiones. El Gobierno informó que ha girado cerca de 92.000 millones a las secretarías de Educación para que doten a los colegios de los elementos de bioseguridad.

No obstante, tanto la Confederación Nacional de Padres de Familia como Fecode consideran que los recursos son insuficientes teniendo en cuenta las grandes inversiones que se deben hacer para garantizar cosas tan básicas en medio de la pandemia como lo es el lavado de manos, “si no existen las garantías no vamos a enviar a nuestros hijos, en el sistema público no hay infraestructura que garantice se cumplan los protocolos, ¿por cada lavamanos en un colegio cuántos alumnos hay?”, se cuestionó el representante de los padres Carlos Ballesteros.

Por poner un ejemplo, en los más de 220 colegios públicos del departamento de Bolívar hay poco más de 7200 baterías sanitarias (inodoro y lavamanos). En promedio cada unidad es utilizada por 70 estudiantes, cuando la norma establece un máximo de 25 estudiantes por batería sanitaria. Es decir solo en el departamento de Bolívar faltan 4.860 unidades, lo que representaría una inversión importante. Esta situación se repite en muchas regiones, incluidas las grandes capitaler.

A las inversiones en infraestructura hay que agregarle que cada colegio que retome clases deberá garantizar los tapabocas, guantes y elementos de desinfección, así como el personal que efectúe estas labores, “si ya teníamos problemas con dotación de cosas básicas del colegio en época normal imagine con todos estos elementos de bioseguridad que además se suman al atraso de nuestra infraestructura educativa. Nosotros no iremos a los colegios ni con alternancia ni siquiera en los municipios no covid”, aseguró el líder del gremio docente, Nelson Alarcón.

Si bien este panorama ya es complicado y causa mucha incertidumbre, hay un factor más que incrementa la confusión entre padres e incluso los mismos rectores de las instituciones. Los anuncios del Gobierno nacional en ocasiones son contradictorios con los que hacen los gobiernos locales.

El caso más claro es Bogotá. La alcaldesa Claudia López anunció que en Bogotá se cancelaba el plan piloto para reabrir colegios en septiembre porque así se lo notificaron desde el Ministerio de Educación. Tras cancelar el piloto dijo que se "liberó un cupo epidemiológico", con lo que el comercio al detal de bienes no esenciales (peluquerías, ferreterías, papelerías y librerías) ya no operará durante cuatro días, sino durante cinco. 

Sin embargo, unas horas después la ministra tuvo que desmentir a López, aclarando que "desde el Ministerio de Educación no se le ha dado ninguna respuesta negativa a Bogotá, ni a ningún ente territorial (...) quizás le dieron a la alcaldesa una información desactualizada, pero reiteramos nuestra total disposición para analizar la propuesta de inicio de pilotos en alternancia con la Secretaría de Educación de Bogotá junto con el Ministerio de Salud", explicó a SEMANA la ministra.

Para el coordinador de la Mesa Nacional de Educación Privada, Fernando Vita, la situación es desconcertante, pues no se sabe a quién creerle, “en un momento de crisis necesitamos una guía en el sector y en estos momentos solo hay confusión, hoy no sabemos cuándo o cómo será el tema de los planes piloto a pesar de que muchos colegios hemos venido trabajando en los protocolos por varias semanas y estamos listos para aplicarlos cuando así lo permita la situación”. 

Desde la alcaldía no se refirieron al por qué de las versiones encontradas con la ministra y se ratificaron en cancelar el plan en septiembre, el cual quedó por el momento pospuesto para retomarse desde el 11 de octubre según el decreto 196. 

Para el profesor de Economía de la Universidad de los Andes Marc Hofstetter, es inentendible que los derechos de los niños, como lo es el de la educación, queden relegados frente a otros sectores económicos. “Nuestra Constitución en el artículo 44 establece que los derechos de los niños prevalecen sobre los derechos de los demás. Los colegios deben ir de primero en la fila de reaperturas. No de últimos”, concluyó.