¿John Travolta se retira de la cienciología?

Seis meses después de la dolorosa partida de Kelly Preston, John Travolta empieza a tomar aire para pensar en su futuro y eso incluye hacerse serios cuestionamientos acerca de su pertenencia en la cienciología, en la cual ha permanecido por 45 años.

La pérdida de su inseparable compañera, con quien estuvo casado por casi tres décadas, estaría en el centro de la trascendental decisión.

Como es conocido, el fundador de la iglesia, L. Ron Hubbard, no estaba de acuerdo con los tratamientos médicos para la cura del cáncer, la enfermedad que cobró la vida de la actriz.

Pero cuando el mal estaba muy avanzado, los Travolta, desesperados, buscaron ayuda en los mejores hospitales de Estados Unidos, haciendo caso omiso a los protocolos impuestos por la organización.

De hecho, en la sentida declaración que hizo cuando dio a conocer la muerte de Kelly, tuvo el cuidado de que quedara claro que así habían procedido.

“Mi familia y yo siempre estaremos agradecidos con los doctores y enfermeras en el MD Anderson Cancer Center y los demás institutos médicos que nos han auxiliado, al igual que a los muchos amigos que estuvieron al lado de Kelly”.

Esta actitud chocó a los líderes de la cienciología y, al saberlo, el actor, muy conocido por filmes como Pulp Fiction, sintió que sus correligionarios lo habían traicionado y prácticamente cortó los lazos con ellos, según InTouch.

Otro viso de distanciamiento se vio en el hecho de que en aquel comunicado no hubo la más mínima mención a la controvertida cienciología ni mucho menos a su líder, David Miscavige.

“Aquí hay algo personal. Es como si John estuviera diciendo: ‘No necesito a la iglesia’”, le comentó a la misma publicación Jeffrey Augustine, exmiembro de la iglesia que ahora es uno de sus más duros críticos.

La misma revista cita el testimonio de Sam Domingo, nuera del tenor Plácido Domingo (otro miembro célebre de la congregación), de acuerdo con el cual a John le ordenaron que no hiciera el duelo por su esposa, “porque en la cienciología no hay tiempo para eso”.

Pero al respecto, Travolta tampoco les hizo caso y al escudriñar un poco la visión de la organización sobre la enfermedad y, en especial, el cáncer, no sería difícil hallar los motivos de su resentimiento.

Hubbard, por ejemplo, despertó controversia a finales de los años 1950, cuando afirmó que el cáncer “no es causado solo por un factor primario, sino que requiere una segunda dinámica o trastorno sexual, como la pérdida de un hijo o cualquier otro mecanismo que pueda desencadenar una condición conocida como cáncer”.

Al respecto, es posible que Travolta se haya sentido particularmente tocado, debido a que en 2009 su hijo Jett murió a los 16 años debido a una convulsión.

En ese momento, informó InTouch, la cienciología los ayudó a elaborar el duelo a él, su esposa y sus hijos Ella, de 20 años, y Ben, de 10.

Con la desaparición de Kelly, no ha sido lo mismo, continuó el magazín, otra de cuyas fuentes fue Becky Miscavige, la exesposa de Ron Miscavige, padre del líder David Miscavige.

En 2012 ella abandonó la iglesia y cree que Travolta debe hacer lo mismo: “Ahora que Kelly murió, albergo la esperanza de que él entre en razón y se salga”.

Travolta es uno de los miembros más famosos de la cienciología junto con sus colegas de Hollywood Tom Cruise y Will Smith.

Pero de acuerdo con Becky, el verdadero motor de su perseverancia en el culto era Kelly, quien alcanzó el nivel más alto a que puede aspirar un miembro, el Operating Thetan Level 8.

John, en cambio, nunca ha llegado tan lejos en las sesiones de auditación, que son uno de los pilares de la práctica.

“Quizás él ahora entienda que la iglesia no salvó a Kelly y ya no lo hace feliz”, reflexionó Sam Domingo.

Una fuente anónima le dijo a InTouch que su esposa se fue a la tumba con ese mismo sentimiento de traición por parte de la iglesia al no apoyar que buscara una cura por fuera de ella.

“Entonces, la promesa final que John le hizo fue que dejaría la religión. Después de 45 años, él se siente libre para hacerlo”, contó el informante.

Pero semejante paso no es fácil de dar, por la misma razón que, se rumora, no lo ha hecho Tom Cruise: las sesiones de auditación, en las que los miembros del culto cuentan intimidades que no quisieran que salieran a la luz, son grabadas y archivadas en secreto.

En venganza por desafiarlos, los líderes podrían dar a conocer aspectos de sus vidas que los avergonzarían y eso los detiene.

En el caso de Travolta, siempre lo han perseguido los rumores de que es gay y, al parecer, la iglesia tiene información al respecto.

Otro exintegrante del culto, William Frank, le dijo en 2017 a InTouch que el artista había acudido a él seriamente dispuesto a renunciar, pero que tenía pánico por las represalias que pudieran tomar en su contra.

Lo cierto es que ese año fue el último que él fue fotografiado en las instalaciones de la organización.

También se dice que le manifestó sus deseos a Tom Cruise, quien reaccionó de manera grosera y cortante.

“John es hoy más víctima que participante de la cienciología”, sentenció Frank en ese momento, y parece que eso no ha cambiado cuatro años después.