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SEÑORA ISABEL

Estuvo en Colombia Isabel Preysler, uno de los personajes más populares de España, para recibir el premio La mujer del año que le otorgó la revista 'Semana Colección'

29 de diciembre de 1997

En 1969, cuando una familia filipina de apellido Preysler tomó la decisión de enviar a la tercera de sus seis hijos a España, no alcanzaba a imaginar que a la vuelta de dos años ella se convertiría en una de las jóvenes más famosas de ese país y que a lo largo de su vida las revistas del corazón y del jet set no le perderían ni un paso. Se trata de Isabel Preysler, uno de los personajes más destacados de España y quien por primera vez visitó a Colombia la semana pasada, en una corta estadía de no más de 48 horas, con el único propósito de recibir el premio colombiano. Isabel podría ser la protagonista de un cuento de hadas contemporáneo. Lo que hace interesante cada detalle de su vida es que, aunque era de una familia de cierto abolengo, no era conocida ni rica, pero logró colocarse en la cima del mundo y tenerlo todo: fama, amor, dinero, poder y hasta título nobiliario. Cuento de hadas o no, lo cierto es que en 1969, a los 18 años, Isabel salió de Manila con las manos vacías pero con una belleza física despampanante. Con sus rasgos orientales y un cuerpo perfecto cualquier recinto quedaba en silencio en el momento en que ella entraba. Hoy, 30 años después, este efecto se mantiene. Y 30 años de belleza total es una bendición que pocas mujeres han vivido.Isabel se dio a conocer como la esposa de Julio Iglesias, el más internacional de los artistas populares españoles de todos los tiempos. Luego se convertiría en marquesa por obra y gracia de su matrimonio con Carlos Falcó, marqués de Griñón, y más tarde se casaría con uno de los hombres más poderosos de España, el ex superministro Miguel Boyer, quien fuera jefe de la cartera de Hacienda y Economía en el gobierno de Felipe González. Aunque ella misma creyó que el asedio de la prensa terminaría con su divorcio de Julio Iglesias los medios siguieron reportando cada minuto de su vida. Cuento de hadasSu primer gran romance comenzó cuando ella tenía 18 años y Julio Iglesias era un ex futbolista convertido en cantante que empezaba a cosechar éxitos en España y Latinoamérica con sus temas La vida sigue igual y Gwendolyn. Si el anuncio del romance de Isabel y Julio causó conmoción, su boda, celebrada en enero de 1971, la produjo aún más. La ceremonia fue considerada en su momento el evento social del año, con una asistencia de casi un millar de invitados. Esta pareja, que para muchos era 'perfecta', produjo tres niños: María Isabel_Chábeli_,Julio José y Enrique. Pero, a diferencia de los viejos cuentos de hadas, el sueño de amor terminó rápidamente pues las ausencias prolongadas en una pareja de personas tan atractivas constituía una ruleta rusa para cualquier matrimonio.Para entonces ya había entrado en la vida de Isabel uno de los grandes aristócratas de España. Para evitar especulaciones y rumores infundados Isabel y Julio decidieron anunciar oficialmente su separación. En agosto de 1979 la pareja obtuvo la nulidad de su matrimonio en el tribunal eclesiástico de Brooklyn. Un año después Isabel se casaba con el marqués de Griñón, un hombre divorciado aficionado a la cacería y dueño de una empresa vinícola de tradición. La ceremonia se realizó en una pequeña ermita en una ceremonia muy discreta y elegante a la que asistió la más rancia nobleza española. Junto a este noble Isabel encontró transitoriamente la tranquilidad y la comunicación que siempre faltó entre ella y Julio. Este segundo cuento de hadas, sin embargo, tampoco duró. Poco tiempo después del nacimiento de su hija Támara comenzaron los rumores sobre las dificultades maritales de la pareja. Otro personaje de novela entraba en la vida de la Preysler, quien para ese entonces era la mujer más famosa de España y la obsesión de todas las revistas del corazón. Se trataba de Miguel Boyer, superministro de Hacienda del gobierno de Felipe González y uno de los hombres más poderosos del país. En el verano de 1985 Isabel y Carlos Falcó decidieron anunciar su separación ante la prensa aunque el divorcio llegó dos años más tarde. La vida sigue igualPara esa época Miguel Boyer ya había renunciado a su cargo de ministro y también a su primera esposa, Elena, de quien se divorció. Fue entonces cuando empezaron a hacer apariciones públicas en las que se mostraban muy enamorados. El noviazgo era ya un hecho. La pareja oficializó esa relación en enero de 1988 pero, a diferencia de sus otros dos matrimonios, esta vez se trató de una sencilla ceremonia civil a la que asistieron únicamente los amigos más cercanos de los novios. La boda no cayó con tanta sorpresa como el anuncio, unos meses más tarde, de que Isabel esperaba su quinto hijo. El 18 de abril de 1989 nació Ana y, como era de esperarse, la foto de la feliz pareja contemplando a la recién nacida apareció en todas las revistas españolas. Después de casi 10 años su matrimonio con Miguel Boyer es uno de los más sólidos del jet set y ella ha podido encontrar la felicidad que se le negó en las anteriores uniones. Hoy continúa dividiendo su tiempo entre sus actividades como madre y los compromisos sociales que una mujer de su posición social debe atender. Su trabajo desde hace 12 años ha sido ser la imagen oficial de las cerámicas Porcelanosa. Pero, como otras mujeres famosas del mundo, Isabel también ha tratado de ayudar a personas menos afortunadas que ella. Es así como decidió liderar una campaña para crear una fundación infantil llamada Ande, que busca fondos para niños de escasos recursos. Hoy, a los 46 años, sigue siendo bella, atractiva y elegante y tiene la belleza de sus 18 años y la serenidad que solo deja la experiencia. Su vida no ha sido la que las madres desean para sus hijas. Ese es un ideal que nunca se obtiene. El mundo de ella ha sido el de las mujeres que saben que hay que combinar trabajo con matrimonio, con hijos y hasta con divorcio. Es el mundo de las realidades donde muchas se queman pero en el cual ella ha sido la gran triunfadora del final del siglo XX.