EMPRESAS

Las micro, pequeñas y medianas empresas pueden ser parte de la solución en época de crisis

Gracias a que son más versátiles y se adaptan con mayor rapidez a nuevos procesos y actividades, estas empresas, más allá de estar en el lado de los afectados por la cuarentena nacional, tienen la capacidad de contribuir al aparato productivo.

14 de abril de 2020

La llegada de la emergencia por cuenta del Covid-19 tomó por sorpresa a diversos sectores de la economía colombiana, y las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes), no han sido la excepción. 

Hoy, este grupo representa el 95 por ciento del universo empresarial, genera el 93 por ciento de los trabajos y aporta el 30 por ciento de la producción industrial, cifras que dan cuenta del papel protagónico que tienen este tipo de organizaciones. No obstante, esta participación se ha visto gravemente afectada por el freno de la economía. 

Según Carlos Restrepo, director de Investigaciones de la Facultad de Administración de Empresas de la Universidad Externado, una coyuntura como la actual complica la situación porque normalmente las mipyme no cuentan con una liquidez importante o un flujo de caja que les permita mantenerse durante varios meses. 

Así las cosas, los primeros golpes se han sentido en frentes como la demanda, especialmente en los sectores de comercio, alojamiento y hotelería y manufacturas. Como consecuencia de lo anterior, el pago de nómina y la generación de empleo se han afectado.

“Esta coyuntura ha llevado a que se frenen los procesos, y al detener la producción se paran los ingresos, con todo lo que ello implica”, explica Restrepo. 

Un aporte clave

Aunque la situación no es fácil para las micro, pequeñas y medianas empresas, lo cierto es que esta crisis se convierte en una gran oportunidad, pues a diferencia de las grandes organizaciones, las mipymes pueden transformar rápidamente sus procesos y atender mercados que registran altas demandas.

A propósito, algunas compañías que se dedicaban a la manufactura de diferentes prendas se volcaron a la fabricación de, por ejemplo, tapabocas y otros insumos para el sector de la salud. Y así son varios los casos de empresas que no se rinden ante las dificultades. “Para una empresa grande usar su maquinaria para hacer otra clase de productos no es sencillo, pero sí lo es para una mipyme, y ahí está la ventaja”, explica el directivo. 

Un esfuerzo para mejorar las finanzas

Históricamente, las mipymes han tenido muchos tropiezos en aspectos como la financiación, y en esta época de dificultades económicas el problema se acrecentó. No obstante, desde diferentes frentes se ha planteado una serie de propuestas orientadas a mejorar ese aspecto. Una de ellas, y debido a que las mipymes son en muchos casos proveedoras de grandes empresas, es que los pagos que normalmente se hacen a 60 y 90 días, ahora se realicen a 30 días. Esa es una posibilidad de la que ya se habla pero que falta implementar. 

Así mismo, desde el gobierno se habla de medidas de excepción en términos de contratación para que los costos asociados a la generación de empleo no sean tan elevados. De igual manera, está la propuesta de crear unos fondos subsidiados para los pagos de seguridad social, con el fin de que las empresas no tengan que asumir estos pagos y así no verse obligadas a despedir personal. 

Algo que ya se hizo fue mover los calendarios tributarios para que los pagos se aplacen. 

Desde la academia también se han planteado propuestas que vale la pena analizar. Según Carlos Restrepo, se ha propuesto facilitar o aprovechar los canales de financiamiento que ya existen, diferentes a los bancos tradicionales, como por ejemplo entidades de segundo piso como Bancoldex o de factoring y fintech. “La idea es que esos recursos lleguen a las mipymes, porque hoy esas líneas de crédito no son posibles para ellas”, asegura. 

Otra alternativa es la creación de un fondo de garantías respaldado por el gobierno para que los bancos tradicionales financien a las empresas que eventualmente no tienen ningún tipo de respaldo.

“Todas estas iniciativas han tenido eco en algunas entidades y al interior del gobierno, y algunos legisladores las están tramitando”, puntualiza el director de Investigaciones de la Facultad de Administración de Empresas de la Universidad Externado.

En conclusión, es evidente que las mipyme tienen muchos retos por superar. Sin embargo, si se ejecutan las medidas pertinentes a tiempo, este segmento puede ser parte clave en la solución de los problemas, pues muchas cadenas productivas y grandes organizaciones no pueden operar y las micro, pequeñas y medianas empresas sí pueden hacer esa producción focalizada.

Para más información visita: https://www.uexternado.edu.co/administracion-de-empresas/