
Opinión
Mujeres unidas multiplican impacto, resultados y transformación
Las mujeres que lideran con rigor, visión y humanidad obtienen resultados superiores. Favorecer este liderazgo en red debe ser una convicción estratégica, humana y colectiva de las organizaciones y las industrias, como un principio empresarial para multiplicar su impacto.
En el entorno empresarial actual, la colaboración entre mujeres es mucho más que una muestra de apoyo: es un activo estratégico que impulsa competitividad, sostenibilidad y evolución cultural dentro de las organizaciones. Cuando las mujeres se articulan desde el liderazgo, la visión y el propósito, los resultados se amplifican y las capacidades se potencian.
Lo he vivido en diferentes momentos de mi trayectoria profesional, y uno de ellos fue la materialización de Placer Laboral. Convertir un libro en un producto físico de alto estándar exige rigurosidad, pensamiento sistémico y excelencia operativa. En ese proceso fue determinante el liderazgo de Carolina Ruiz, quien, desde su rol como Gerente General de ITG, dirigió y supervisó la impresión de la obra con precisión técnica, visión estratégica y un compromiso absoluto con la calidad.
Su intervención no representa únicamente un hito personal. Representa una verdad que trasciende industrias: cuando las mujeres lideran juntas, los resultados se multiplican.
No se trata solo de coordinar una tarea; se trata de cómo las alianzas entre mujeres abren espacios de innovación, fortalecen culturas organizacionales y generan soluciones más integrales. Lo que ocurrió con Placer Laboral es un ejemplo, entre miles, de lo que sucede cuando el liderazgo femenino se une para producir valor.

Este principio está respaldado por tendencias globales: las organizaciones que fomentan la colaboración entre mujeres experimentan mejoras tangibles en desempeño, clima laboral, retención, innovación y reputación corporativa. No es una intuición, es una ventaja competitiva comprobada.
1. Multiplicación del impacto
Una líder impulsa un proyecto.
Varias líderes trabajando juntas desde el propósito expanden su alcance hacia nuevas áreas, industrias y comunidades. Las redes de mujeres amplifican la capacidad de ejecución y abren oportunidades que una sola líder no podría alcanzar en la misma magnitud.
Así lo planteó la investigación titulada Masa crítica: El impacto de tres o más mujeres en los consejos directivos corporativos de Konrad, Erkut y Hooper (2007), donde se evidenció que cuando aumenta el número de mujeres a tres o más en posiciones de liderazgo, sus opiniones se convierten en una masa crítica que impulsa el cambio cultural en las empresas, y su trabajo conjunto influye en los procesos y desempeño.
2. Multiplicación de resultados
Los equipos con liderazgo femenino presentan mejores indicadores de compromiso, estabilidad, innovación y resultados operativos.
Esto no responde a cuotas. Es una evidencia empresarial.
Un estudio publicado por Estudios Gerenciales en el 2018, titulado Las mujeres en posiciones de liderazgo y la sustentabilidad empresarial: evidencia en empresas cotizadas de Colombia y Chile, evidenció que el liderazgo femenino favorece el nivel de cumplimiento de resultados en la dimensión económica de la organización.
El proceso de impresión de Placer Laboral, liderado por Carolina, refleja lo que ocurre cuando las mujeres ejecutan con precisión, visión de cliente y excelencia operativa.
3. Multiplicación de la transformación
Las mujeres tienen una capacidad singular para anticipar escenarios, gestionar complejidad y liderar soluciones integrales.
Cuando colaboran entre sí, esa capacidad se eleva y se traduce en transformaciones organizacionales: conversaciones más profundas, decisiones más inteligentes y operaciones más eficientes.
La fotografía que complementa esta columna es de mujeres en posiciones estratégicas, provenientes de sectores distintos, pero unidas por un propósito común que representa algo más grande que un proyecto puntual. Representa la idea de que cualquier organización puede multiplicar su impacto si promueve la colaboración femenina en roles críticos.
Porque detrás de cada resultado visible hay una cadena de decisiones estratégicas y personas que eligen sumar. Y cuando esas personas son mujeres que lideran con rigor, visión y humanidad, los resultados son superiores. Hoy lo reafirmo con absoluta convicción:
Mujeres unidas multiplican impacto, resultados y transformación.
No es un mensaje emocional; es un principio empresarial comprobado.
Un principio que debemos seguir fortaleciendo para que más mujeres, más organizaciones y más industrias experimenten el poder del liderazgo femenino trabajando en red. Lo viví con Placer Laboral. Lo viví con el liderazgo de Carolina Ruiz. Y lo sigo promoviendo como convicción estratégica, humana y colectiva.
