Un gol en Rusia que hizo temblar Ciudad de México

Desde el pitazo inicial el equipo nacional de México salió creyendo que podía ganar el partido. Los once dirigidos por el colombiano Juan Carlos Osorio no se replegaron en su propio campo y fueron en busca del gol. Los alemanes reaccionaron también con ofensiva y querían adelantarse en el marcador. Pero en el minuto 35, en el estadio Luzhniki, un sensacional pase en profundidad de Chicharito llegó a los pies de Hirving ‘Chucky‘ Lozano, entonces el jugador el del PSV fusiló con su pie derecho a Manuel Neuer y marcó la diferencia que terminó siendo definitiva.

Los mexicanos que viajaron hasta la capital rusa y llenaron gran parte del estadio moscovita estallaron de alegría. Naturalmente, su equipo se iba arriba en el marcador. Pero más impresionante fue la celebración de los que se quedaron en casa. Pues justo en ese momento un temblor artificial sacudió la capital mexicana Eso reportó el SIMMSA, la institución encargada del monitoreo sísmico en ese país.

Y no era para menos. El gol fue también todo un terremoto en el seleccionador colombiano del equipo mexicano. Luego de celebrar con euforia su cara de nervios volvió en seguida, sabía que la reacción de Alemania sería buscar sí o sí el partido. Sabía que ahora había algo qué perder.

El equipo de Joaquim Löw, como era de eseprarse, salió como una fiera con hambre en busca del empate, pero nunca lo consiguió, ni siquiera después del entretiempo en donde tuvo tiempo para replantear su forma de atacar. Fue efectiva, con muchas llegadas que de seguro tenían el corazón del técnico colombiano acelerado, pero nunca llegaron a la meta, nunca se concretó el gol del empate.

Los mexicanos también quisieron probar en ataque y no quedarse en defensa, y pudieron haberse sentido otros dos temblores en Ciudad de México si Layún hubiera estado más afinado y su pierna derecha fuera tan efectiva como su zurda.

México sufrió muchas oportunidades cercanas de Alemania, pero también había mística y suerte de su lado. El balón no entró y en el pitazo final Osorio celebró la victoria de uno de los partidos más importantes de su vida. El que produjo un temblor.