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Ya va casi por la mitad la excavación del hueco al centro de la Tierra de China
Con una profundidad final prevista de 11.100 metros, el pozo está situado en el interior del desierto de Taklimakan, el más grande de China.
La cuenca del Tarim es una de las áreas más difíciles de explorar debido a su duro entorno terrestre y sus complicadas condiciones subterráneas.
A pesar de estas complicaciones, el pozo más profundo excavado por el ser humano sigue siendo el pozo superprofundo de Kola, cerca de Murmansk, en el Ártico ruso, que la Unión Soviética inició en 1970 y que alcanzó una profundidad de 12.262 metros. Se cerró en 2008.
Durante el proceso de perforación, el equipo, que incluye brocas y tubos de perforación que pesan más de 2.000 toneladas, se adentra profundamente en la Tierra, penetrando en más de 10 estratos continentales, informa Xinhua.
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“La dificultad de construcción del proyecto de perforación se puede comparar con la conducción de un camión grande sobre dos cables de acero delgados”, dijo Sun Jinsheng, académico de la Academia de Ingeniería de China, cuando se informó sobre el inicio de la excavación.
China deja atrás los miedos a la covid-19
El Gobierno chino anunció que, a partir del miércoles 30 de agosto, los viajeros que lleguen desde el extranjero no tendrán que presentar ningún test negativo de covid-19. Concluye así una de las pocas medidas que aún persisten desde el estallido de la pandemia.
El portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Wang Wenbin, confirmó este lunes los cambios en rueda de prensa, después de que en los últimos meses el gigante asiático haya reducido progresivamente los controles impuestos al turismo internacional.
China, supuesto origen del virus SARS-CoV-2, mantuvo algunos de los protocolos más estrictos de todo el mundo para contener la pandemia, en virtud de una política que pasaba por reducir a cero la tasa de contagios a costa de imponer confinamientos indiscriminados.
En diciembre de 2022, puso fin a esta política de ‘casos cero’, lo que desencadenó una ola sin precedentes de contagios que ahora parece contenida. Las autoridades reconocieron decenas de miles de muertes en apenas una semana, aunque expertos internacionales dan por hecho que la cifra real es mucho mayor.
Sobre los avances del virus, el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el doctor Tedros Adhanom, pidió a todos los países “fortalecer la supervisión de la covid-19″ y “continuar implementando las recomendaciones para salvar vidas” ante la presencia de las nuevas variantes de ómicron EG.5 y BA.2.86.
Así lo expresó Adhanom en una rueda de prensa en la que resaltó que “la covid-19 sigue siendo una amenaza de salud global”, ya que, aunque actualmente la OMS dispone de menos datos sobre la incidencia en los diferentes países debido a que estos han dejado de recogerla, “se ha visto un aumento de las hospitalizaciones, ingresos en UCI y muertes en algunos países”.
En este sentido, el director general solicitó a todos los países continuar informando de su situación sobre la covid-19, para que “puedan asesorarles sobre el riesgo de las nuevas variantes EG.5 y BA.2.86″.
Por su parte, la líder técnica de covid-19 de la OMS, la doctora Maria Van Kerhove, explicó que “el virus continúa evolucionando porque hay una serie de variantes en circulación, todas ellas de ómicron”.
“La vigilancia es realmente importante para que podamos seguir las tendencias”, declaró, asegurando que “solo tienen datos de hospitalizaciones de 19 países”. “La vigilancia no solo es importante para rastrear las variantes, sino también para que los individuos sepan si están infectados o no”, añadió la doctora Kerhove.
*Con información de Europa Press.