Iragorri, ¿será el elegido?

Aurelio Iragorri es considerado por muchos congresistas como el mejor alumno de Germán Vargas Lleras. Aunque no se conocían de tiempo atrás, su trabajo en el ministerio del Interior los convirtió en una llave que le manejo al gobierno los intereses políticos en el Congreso.

El payanés era viceministro del Interior cuando el presidente Juan Manuel Santos "se lo sonsacó" a Vargas Lleras. Lo nombró consejero de asuntos políticos, la oficina de la Casa de Nariño que, entre otras, se encarga de solucionar las crisis entre los políticos con asiento en el parlamento.

Los congresistas dicen que la baraja de candidatos, o el sonajero que se ha empezado a agitar, no es necesario para Santos.

Pues consideran que para manejar el Congreso, en las dos últimas legislaturas del gobierno, donde históricamente el respaldo puede mermar, Santos necesitaría un hombre de plena confianza.

Dicen que lo tiene en la Casa de Nariño y que no debería poner a inventarse. Iragorri fue el viceministro con mayor interlocución en el Congreso, incluso en las épocas en las que Armando Benedetti, como presidente del Congreso, prohibió la entrada de los 'vices' a las sesiones.  

A Iragorri, además, le han confiado varios 'chicharrones'. Fue encargado de las gobernaciones de Casanare y Valle, en los momentos que entraron en interinidad por sanciones a sus titulares.

Pero el juego burocrático podría obstaculizar la entrada de Iragorri al ministerio.

Muchos lo afilian al Partido de La U, el partido del presidente y de las mayorías parlamentarias, por ser hijo del veterano senador de ese partido, Aurelio Iragorri.

Esta circunstancia podría generar celos en otras colectividades. Los conservadores cada vez se sienten con menos cuotas en el gabinete y los liberales, que se entendieron a la perfección con Vargas Lleras, podrían perder el liderazgo que ostentaron en el Congreso.

Sin embargo, en lo que todos los congresistas coinciden es que las relaciones con Iragorri han sido fluidas y armónicas. Incluso, en la nueva sede del ministerio del Interior, donde más incertidumbre generó el relevo en el gabinete, todos cruzan los dedos para que quien ocupe el despacho privado sea Aurelio Iragorri.