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Desmovilización de Cacica Gaitana fue un engaño a la comunidad internacional: Biófilo

El presunto jefe del supuesto frente de las Farc asegura que Luis Carlos Restrepo era el primer responsable del “montaje” de la desmovilización. Dice que dineros del Estado, de la comunidad internacional, y hasta de un narco, sirvieron para “pagar el silencio” de quienes participaron del “show”.

13 de febrero de 2012

Alias Biófilo, aquel joven de pelo largo, uñas limpias, camuflado nuevo, gafas gucci, que el país conoció como el comandante, o ideólogo, del presunto frente de las Farc Cacica Gaitana, reveló nuevas incidencias de aquella desmovilización que hoy tiene en líos al excomisionado de paz Luis Carlos Restrepo, por la que está prófugo de la justicia.

En una entrevista con el informativo Noticias Uno, alias Biófilo, seis años después de la desmovilización (que para la Fiscalía fue falsa y un engaño al Estado), insistió en la responsabilidad de Restrepo en la desmovilización del 7 de mayo de 2006 en Alvarado, Tolima.

Según Biófilo, Restrepo “fue determinante en que se lograra hacer este montaje y presentarlo al país como éxito de la política de seguridad democrática, que incluso, como se registra en el video, el emisario nos dice que el Presidente está enterado y que es el que ha dado la autorización para que se lleve a cabo la desmovilización”.

Para este presunto guerrillero desmovilizado, el engaño no solo fue al Estado colombiano, pues califica que el mayor fraude fue “a la comunidad internacional que en un porcentaje muy alto, yo me atrevo a decir que entre 60 y 80 por ciento, fueron quienes desembolsaron dineros para el proceso de paz y no solo el caso de Gaitana, hablo de todos los demás casos de desmovilización fraudulenta porque los hubo”.

Incluso, Biófilo aseguró que en la desmovilización fraudulenta hubo recursos provenientes de una banda delincuencial. Porque asegura que un narcotraficante, Hugo Rojas Yépes, “al igual que de la oficina del Alto Comisionado para patrocinar una fundación Paz Mundial Colombia con la que de cierta manera apoyando esa fundación, se mantenía calladas y quietas a las personas que habían participado no en la desmovilización sino en la gestión que son otras que no han nombrado”

Biófilo asegura que con el dinero oficial y fondos de cooperación internacional para la desmovilización, “se pagó el silencio” de los involucrados en el montaje.

Y lo más extraño, para Biófilo es cómo el Estado colombiano no se dio cuenta del engaño.

“Un día después de la desmovilización participaron todas las instituciones que hacen parte del CODA (Comité Operativo para la Dejación de Armas), excepto la Fiscalía, es decir: Bienestar Familiar, Registraduría, DAS, CTI, Procuraduría, etcétera… Nadie se percató que la mayoría no tenía antecedentes judiciales”, dijo en la entrevista a Noticias Uno.