Mina del ELN casi mata a niño indígena de 13 años, en Antioquia

Una dura factura cobró la práctica del ELN de poner campos minados en el territorio para evitar la persecución de las Fuerzas Militares. Ahora las víctimas fueron tres indígenas del municipio de Murindó, entre los cuales había un niño de 13 años que, aunque recibió atención y pudo salvar su vida, finalmente perdió su pierna.

La denuncia la hicieron los mismos pobladores de la región, específicamente la comunidad indígena Isla, del Resguardo Río Murindó.

Según se conoció, el menor de 13 años pertenece a la isla Embera Eyabida, indentificado como Plinio Dogarí Majoré. Iba caminando con dos personas, entre ellas su profesor de escuela; los dos fueron también afectados por la detonación, pero las heridas fueron leves y la atención se dio en los centros asistenciales.

La Organización Indígena de Antioquia, que informó del hecho, advirtió que las minas fueron sembradas por “por integrantes del ELN, quienes desde el mes de enero, anunciaron a través de un panfleto y un audio por WhatsApp, el peligro que correrían las comunidades si no permanecían confinadas en sus tambos”.

Según cuenta la OIA, “en compañía de la Guardia Indígena y los familiares de las víctimas, los trasladaron hasta el hospital del municipio de Murindó, para que recibieran atención médica, Plinio Dogarí, tuvo que ser remitido a un centro asistencial de mayor complejidad”.

Aunque la explosión de la mina que afectó a este menor de edad pone lo ojos sobre la zona y las amenazas que viene realizando el ELN, estas denuncias se realizan desde hace dos años, en especial en los municipios del occidente de Antioquia, Atrato Medio y Bajo Cauca.

“Como organización rechazamos categórica y públicamente la presencia de actores armados al margen de la ley que vienen haciendo tránsito indiscriminado e instalando minas antipersonal en nuestros territorios, obedeciendo a una disputa armada territorial en los resguardos indígenas, poniendo en peligro el proceso organizativo, la jurisdicción especial indígena, los derechos humanos, el derecho internacional humanitario y el derecho a la vida de nuestros indígenas”, señalaron los miembros de la OIA en un comunicado.

Los indígenas pidieron la intervención del Gobierno, rechazaron que los territorios indígenas se estén convirtiendo en escenarios de guerra, poniéndolos en riesgo. Pidieron a la institucionalidad y las organizaciones defensoras de derechos humanos, que hagan acompañamiento humanitario a las comunidades indígenas del municipio de Murindó.

Desde la Gobernación de Antioquia, el secretario de Gobierno, Paz y No Violencia, manifestó su rechazo a esos hechos de violencia. “Condenamos este actuar de los grupos ilegales, hacemos un llamado a la comunidad, a los medios, y las organizaciones internacionales para que rechacemos el actuar de estos grupos. Desde la gobernación estamos trabajando para realizar el desminado militar en esa región y donde sea posible el desminado humanitario”.

Sobre la persecución de las estructuras del ELN que operan en esa zona, señaló que “con la Fiscalía General, la Policía y el Ejército estamos trabajando para que se dé la captura y condena de los individuos responsables de estos hechos. Con la Unidad de Víctimas y la Alta Consejería para la Paz de la Presidencia, continuaremos dándole todo el apoyo para evitar que se vuelvan a dar estos hechos”.