El eclipse lunar penumbral se caracteriza por un ligero oscurecimiento de la superficie de la Luna, que se produce cuando la Tierra bloquea parcialmente la luz solar que refleja.
“Los eclipses se repiten durante el ciclo de Saros, un período de aproximadamente 18 años y 11 días. La Magnitud Umbral da la fracción del diámetro de la Luna sumergida en la sombra umbral de la Tierra en el instante del mayor eclipse”, detalla la NASA.
Este fenómeno astronómico, que sólo se produce una o dos veces al año, empezó poco después de la salida del sol en el centro del continente africano, atravesando la República Democrática del Congo, Sudán del Sur y el norte de Etiopía. Luego avanzó para finalizar en el océano Pacífico, en el sur de la isla de Guam tras haber atravesado India y China en particular.
En este tipo de eclipse, la Luna pasa por delante del Sol, en alineación con la Tierra de manera lo suficientemente perfecta como para ocultarlo. Pero no lo hace íntegramente, como ocurre cuando el eclipse es total: al no estar la Luna tan cerca de la Tierra, se trata de un eclipse anular, que en su punto máximo deja visible un anillo alrededor del Sol, denominado "círculo de fuego".
*Con información de AFP