Home

Opinión

Artículo

Julio Londoño Paredes Columna Semana

Opinión

Algunas declaraciones de jefes de Estado

No todas las declaraciones de un jefe de Estado carecen de consecuencias.

Julio Londoño Paredes
15 de marzo de 2024

El papa Francisco, en una reciente declaración, expresó que “Ucrania debía izar la bandera blanca de la paz en la guerra con Rusia”. Le surgieron por todas partes airadas protestas, que incluso llegaron a afirmar que esa había sido la controvertida política de Pio XII, al que se acusó de complacencia con los nazis. Sin embargo, la Secretaría de Estado del Vaticano se apresuró a precisar que el santo padre lo que quería decir era que “se debía negociar”, y que negociar no era rendirse.

Por su parte, el presidente de Francia mencionó que en Ucrania van a tener que intervenir fuerzas terrestres de la Otan. Se le vinieron encima, no solo los Estados Unidos, sino varios países de la Organización. Naturalmente, Putin aprovechó la oportunidad para advertir que, si esa intervención llegara a darse, Rusia emplearía sus armas nucleares como lo ha advertido. El Ministerio de Relaciones Exteriores de Francia tuvo que explicar rápidamente que la declaración del mandatario galo había sido formulada en un contexto diferente.

Sin embargo, las dos declaraciones ponen en evidencia el pesimismo sobre las operaciones de Rusia contra Ucrania, que se extiende también a sectores en los Estados Unidos y la Unión Europea.

Rusia ha sido un país mucho más duro de lo que se había pensado, y esta a su vez consideró que su invasión a Ucrania iba a ser una especie de marcha triunfal. Entre tanto, países limítrofes de Rusia piensan que ellos pueden ser las próximas víctimas y que un tratado de paz sería una modalidad del “acuerdo” logrado por el ingenuo primer ministro británico Neville Chamberlain con Hitler y que facilitó al Führer la iniciación de la Segunda Guerra Mundial.

Aquí las cosas tienen otras características. Por ejemplo, nuestro primer mandatario habla de la extraordinaria idea de darle agua a la alta Guajira, aduciendo que eso no se ha logrado por la incompetencia de los gobiernos anteriores.

No ha precisado cuáles gobiernos, pero podría ser desde el de Alonso de Ojeda, que llegó al Cabo de la Vela en 1502, o el del virrey Eslava en 1739, cuando se restableció el Virreinato de la Nueva Granada y se incorporó a él a la provincia de Riohacha; no obstante que todos los gobiernos desde entonces han luchado con el problema de la falta de agua en La Guajira. Sin embargo, la idea de los carrotanques fue realmente ingeniosa y especialmente “productiva”.

Ya la gente y la comunidad internacional se han acostumbrado a las declaraciones sobre todo tipo de cosas que cotidianamente hace nuestro presidente. A diferencia de lo que sucede en el Vaticano, en Francia o en otros países, aquí los ministros hacen “aclaraciones sutiles” al jefe de Estado, y otros ministros a su vez ayudan con “precisiones” a sus colegas.

Es una modalidad diferente y lo bueno es que las declaraciones y las aclaraciones no tienen consecuencia alguna…

Noticias Destacadas