El Bloodhound SCC superará ampliamente la marca actual de velocidad terrestre. | Foto: BBC

TECNOLOGÍA

Cómo frenar un auto a más de 1.600 km/h

Un equipo de ingenieros británicos está desarrollando un vehículo que viajará a 1.610 kilómetros por hora. Pero, una vez alcanzada la marca, ¿cómo piensan detenerlo?

Alianza BBC
23 de abril de 2012

Los discos de freno de carbono que se usan habitualmente acabarían derritiéndose.
 
La BBC le pidió al comandante Andy Green, quien tiene en su haber el récord de velocidad terrestre, que explicase los desafíos que presenta el diseño del Bloodhound SSC.
 
El año próximo, él será quien probará las cualidades del vehículo que, impulsado por un cohete adosado al motor de un jet Eurofighter Typhoon, superará por lejos las marcas de velocidad actuales. Este es su relato:

El aceleramiento es sólo la mitad del problema.
 
Una vez que cruzas como un rayo los controles de velocidad dispuestos a una milla (1,6 km) de la largada, te enfrentas con el dilema de cómo frenar un vehículo pesado, que viaja a velocidades altísimas, en una distancia limitada -tenemos 8,8 kilómetros para frenar en la pista de Hakskeen en Sudáfrica.
 
Casi nueve kilómetros parecerían suficientes, pero si recorres una milla en 3.5 segundos, ¡no es tanto!
 
Para complicarlo todo un poco más, el vehículo -por su tipo de diseño- genera la menor fricción aerodinámica posible, así que seguirá rodando un buen tiempo.
 
Así que frenarlo de una forma segura es quizás más difícil que acelerarlo.
 
Tres generadores de resistencia

Tenemos distintas formas de asegurarnos de que no acabaré recorriendo toda Sudáfrica después de superar los 1.610 km/h.
 
Para detener el auto tenemos que aumentar la fricción, así que estamos instalando frenos de aire y dos paracaídas. Tres elementos que ayudaran a desacelerar el coche.
 
Una vez que el vehículo baje a unos 320 km/h -lo que nos llevará unos seis kilómetros y medio-, podré usar los frenos de las ruedas para detenerlo en 1,2 kilómetros, lo que nos deja un margen de seguridad de poco más de un kilómetro... por si algo falla.
 
El diseño de los frenos de aire está muy avanzado.
 
Hemos recibido una gran ayuda de las compañías Parker y Samtech para la construcción y el análisis de las presiones a las que someteremos la estructura.
 
También hemos recibido colaboraciones a través del "crowdsourcing" de algunos elementos de los frenos de aire, por ejemplo de los estudiantes de la Universidad de Lancaster, quienes han estado investigando las cargas que actúan sobre las puertas cuando se abren.
 
Luego tenemos los paracaídas de freno. Un paracaídas de dos metros de diámetro nos dará unas 9 toneladas de resistencia a una velocidad Mach 0.9, justo lo que necesitamos para no salirnos de la pista.
 
Paracaídas contorsionista
 
Para evitar que los paracaídas queden justo en el área de la turbulencia que se genera detrás del vehículo, necesitamos una correa de 20 metros.
 
Pero con una carga de nueve toneladas y un golpede apertura de un 50% más, más otro 50% extra por precaución, no puede ser una correa cualquiera. Tiene que aguantar unas 20 toneladas.
 
Ahí entra en escena la compañía Marlow Ropes, que probablemente fabrica las cuerdas más fuertes del mundo. Ellos fueron los proveedores de las correas para el Thrust SSC y el JCB Dieselmax; los hemos usado en el pasado y sabemos que son confiables.
 
La correa medirá 17 metros, porque cuando cargue con 9 toneladas se estirará otros 3 metros hasta completar los 20.
 
Survival Equipment Services, nuestros especialistas en paracaídas, están en el proceso de empaquetar una correa de muestra y un paracaídas en una bolsa, para que podamos probar que entra en el limitadísimo espacio que tenemos en la parte de atrás del auto.
 
El paquete tiene que entrar en un hueco de 1 metro por 250 mm. Si no cabe, entonces tendré que negociar con el equipo de diseño para que me hagan un poco más de espacio, o si no tendremos que almacenar los paracaídas a presión, lo que será un trabajo arduo.
 
De regreso al acero

Más allá de esto sólo nos quedan los frenos de las ruedas, que se instalarán solamente en las ruedas delanteras. Aquí tenemos un pequeño problema.
 
Los frenos no podrán usarse a 1.610 km/h. Se derretirían inmediatamente. Pero sí estarán girando a esas velocidades y, por lo tanto, necesitaremos discos de freno muy poderosos si han de sobrevivir el viaje a esas velocidades.
 
Nos hemos pasado el año buscando discos de carbono que aguanten estas velocidades pero no hemos encontrado ni una compañía que nos los quiera fabricar.
 
Incluso probamos los discos del bombardero de la Fuerza Aérea Real, el Typhoon.
 
Vimos cómo este avión hizo cosas increíbles en Libia, pero sus discos no aguantan 1,610 km/h a nivel del suelo.
 
Así que llegamos otra vez a la pregunta original: ¿cómo hacemos para detener el auto antes de que se acabe la pista?
 
La solución que encontramos es sencilla: usar discos de acero.
 
El acero no es ideal para el Bloodhound, porque los discos se distorsionarán y habrá que reemplazarlos con frecuencia. Pero el acero es fuerte y barato.
 
En estos momentos estamos mirando algunos discos comerciales para autos de carrera, para ver si existe algún modelo que sirva para el Bloodhound SSC.