Crear relaciones duraderas es positivo para el estado de ánimo.

VIDA MODERNA

Ocho pasos para una vida sana

Muchos creen que ser saludable es sinónimo de sacrificio y restricción, pero lograrlo es sencillo y lo mejor de todo es que la única inversión que se requiere es la disposición.

20 de abril de 2017

Ni dietas basadas en arándanos o agua mineral traída directamente del Himalaya, ni rutinas de ejercicios al estilo militar son necesarias para llevar un estilo de vida sano. Todo lo que se necesita está al alcance y se puede hacer sin necesidad de invertir grandes sumas de dinero, ni de cambiar radicalmente las rutinas. Los expertos explican en ocho sencillos pasos cómo lograr desde ya una vida sana.

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1. Conózcase a sí mismo: Antes de tomar decisiones en cuanto a cambios de rutina, haga una visita al médico y al odontólogo. Póngase al día con el esquema de vacunación y chequeos preventivos de rutina. “Tenga presente cuáles son sus medidas: Para saber si tiene sobrepeso, la ecuación es medir la altura, el peso y la barriga”, asegura la dietista Luisa Burgos. Conocerse ayuda además a identificar mucho más fácil cuando algo no funciona bien.

2. Aliméntese de muchos colores: “No se trata de vetar ciertos alimentos o solo consumir algunos porque no va a funcionar. Es simplemente escoger mejor qué comer de acuerdo a los gustos personales”, dice Burgos. Lo importante es que sea variado y colorido pues entre más colores se garantiza la ingesta de mayores nutrientes. Entre los cambios sencillos que se pueden hacer está llevar consigo bocadillos saludables para que los tenga a la mano cuando sienta hambre. En cuanto a la alacena, se recomienda dejar un poco las harinas y armar un arcoíris en la nevera con los colores de las frutas y verduras que se deben consumir más. “La recomendación es que sean cinco porciones como mínimo al día”, añade la especialista.

El punto de la alimentación puede ser uno de los que más cuesta adoptar, entre otras razones porque contiene un componente psicológico fuerte. “Si nos comemos un dulce de más o cedimos a la tentación de una hamburguesa no hay que sentir culpa por eso, porque esas emociones pueden llevarnos a claudicar y comer de más”, explica la psicóloga Camila Cadena. Lo que sugiere la experta es que la relación con la comida sea de disfrute y no una tragedia. “Si cuando va a comer está dispuesto, lo hace despacio y con conciencia de lo que está haciendo, no solo está tomando el control de la situación, sino se sentirá satisfecho más rápidamente”, dice.

3. Paso a paso: La recomendación de hacer actividad física es imprescindible. Los especialistas aseguran que el mínimo son dos horas y media a la semana para mantener un estilo de vida saludable. Al respecto, cuenta Cristian Díaz, licenciado en educación física, que lo ideal es intercalar minutos de actividad aeróbica con ejercicios de fortalecimiento muscular. “Caminar es el ejercicio más recomendado y no cuesta nada, pero para combatir la pereza, conviene buscar actividades divertidas que favorezcan el movimiento, como por ejemplo bailar, que además son buenos motivadores”.

También se recomienda establecer metas y si las cumple, hay que usar el método de la recompensa, teniendo en cuenta que no sea comer en exceso. Por su parte, si no tiene tiempo, haga actividad física en el trabajo. “Llegue en bicicleta, camine durante diez minutos a la hora del almuerzo, o prefiera las escaleras al ascensor son pequeños cambios que se pueden hacer y con constancia traen buenos resultados”, dice Díaz.

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4. Duerma bien: Este punto es tan importante como llevar una dieta balanceada o hacer ejercicio porque el descanso permite administrar mejor la energía. Para lograrlo, hay que apagar el televisor o el computador un par de horas antes de dormir porque la luz incandescente de estos aparatos nos mantiene alerta y hace difícil conciliar el sueño. Una buena idea puede ser tomar un baño de agua caliente, pues esto deja los músculos más relajados y dispuestos para descansar. “No espere hasta el fin de semana para dormir bien, porque no va a recuperar todas las horas de sueño perdidas”, dice Cadena. Si los problemas de sueño vienen de varios meses atrás, no los ignore y hágase revisar por un especialista que le ayude a corregir este mal hábito.

5. Maneje el estrés: Para tener una vida saludable, es necesario tener un buen estado de ánimo. Actividades como la meditación, el yoga u otras de distracción ayudan a mantener las situaciones estresantes a raya. “Empiece a encontrar maneras de manejar las situaciones estresantes para que luego no estallen y se arme un problema mayor. Haga ejercicios de respiración que le ayudarán a calmarse o busque una actividad que le permita descargar toda esa tensión”, dice Cadena.

6. Disfrute los amigos: Crear relaciones duraderas es positivo para el estado de ánimo. Empiece a elegir mejor a las personas con las que convive a diario, pues “compartir con quienes encuentra puntos en común y tienen perspectivas parecidas a las suyas, es un incentivo mayor para cumplir con sus objetivos porque se sentirá apoyado, en vez de juzgado”, explica la psicóloga.

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7. Ejercite la mente: Participar en actividades estimulantes puede ser bueno para el cerebro. Se ha demostrado en variados estudios que poner a prueba la mente con actividades como la lectura, los juegos de mesa o aprender cosas nuevas ayuda a prevenir el desarrollo de la demencia.

8. Cuide la vida: Si tiene problemas graves de salud o padece de una enfermedad crónica lo mejor es adherirse el tratamiento. Esto es una prioridad que ayuda a tener una vida sana y normal. De la misma forma, hay que evitar conductas riesgosas como el tabaquismo o cualquier otra adicción insana. Y, en la vida diaria, adopte medidas de prevención como usar el casco o el cinturón de seguridad, hábitos que no cuestan nada y que sí salvan vidas.