Vida Moderna
Cuatro infusiones para mejorar la circulación sanguínea
Estas bebidas no emplazan el tratamiento médico, por lo que su consumo debe ser consultado con un especialista.
Una buena circulación ayuda al cuerpo a mantenerse sano y el principal encargado de este proceso es el corazón. Este órgano genera el movimiento regular de la sangre a través del sistema circulatorio, distribuyendo oxígeno y llevando nutrientes a las células del cuerpo.
La sangre transportada también elimina el dióxido de carbono junto con algunos elementos residuales. Por ello, entre mejor sea la circulación, mejor salud, sobre todo vascular, tendrá el cuerpo.
Una mala circulación puede desencadenar una serie de afecciones conocidas como enfermedades vasculares. La mayoría de estos problemas están asociados a las venas varices, sin embargo, también se pueden presentar otros síntomas como fatiga, mareos, dolor de cabeza, manos y pies fríos.
Estas afecciones ocurren cuando las personas han perdido elasticidad en sus venas y estas carecen de fuerza para transportar de forma correcta el líquido. Es así como, por la fuerza de gravedad, este líquido se acumula en algunas áreas del cuerpo, provocando molestias, reseña el diario ABC de España.
Tendencias
Otros síntomas de un problema con la circulación son los dolores en las piernas, calambres musculares, latidos cardíacos irregulares, pérdida de cabello y sequedad de la piel, entumecimiento u hormigueo en partes del cuerpo, entre otros.
Por lo anterior, la revista especializada UnComo, publicada a través del portal Mundodeportivo, listó una serie de infusiones con plantas que ayudan a mejorar la circulación con naturalmente.
Romero
Es una de las plantas más usadas para tratar enfermedades, como medicina alternativa. El portal de salud de Mapfre, explica que además de ayudar con la circulación, puede llegar a facilitar la expulsión de la bilis acumulada en el organismo y disminuir la generación de gases en el tubo digestivo.
También, reduce los cólicos, es diurético, antiinflamatorio, antiulcerogénico y antioxidante, y además de todo esto, también ayuda a aumentar el flujo sanguíneo.
A través de una aromática o una infusión, se puede disfrutar de las propiedades del romero, se necesitaría poner a hervir agua y cuando esté en su punto de ebullición simplemente se añade las hojas de la planta, minutos después se puede disfrutar de la bebida.
Diente de león
Es una planta con propiedades depurativas y diuréticas que se pueden aprovechar en una infusión para bajar el ácido úrico. Sus compuestos mejoran el funcionamiento de los riñones y el hígado y evitan la retención de líquidos, según lo indica una investigación realizada por el Institute Tai Sophia, de Estados Unidos.
Así mismo, suele ser muy usado en tratamientos contra las varices. Para preparar la bebida se necesita una cucharadita de hojas secas de diente de león y una taza de agua. Se ponen la hojas en una taza de agua hirviendo, se tapa la bebida, se deja que repose por 10 minutos y se cuela. Se recomienda ingerir dos tazas de infusión de diente de león al día, durante dos semanas.
Cola de caballo
Es una especie de planta del género Equisetum, ayuda en el mantenimiento de las paredes vasculares debido a sus altos contenidos de silicio, un componente clave para la formación de colágeno.
Esta yerba puede aplicarse en pequeñas cantidades con baños de agua tibia para mejorar la tensión del cuerpo, asimismo, se puede tomar por medio de una infusión que se realiza dejando hervir varias hojas secas en agua por 20 minutos. Se recomienda, no beber más de dos tasas de agua de cola de caballo por día.
Jengibre
El jengibre es una especia que ayuda a mejorar la circulación sanguínea en la medida que su consumo permite que esta sea más fluida, y puede ser incluido en la dieta para preparar infusiones, salsas o cremas de verduras, entre otras preparaciones.
Para preparar agua de jengibre se debe poner una taza de agua a hervir y añadir la raíz del jengibre pelado. Para que el jengibre suelte todas sus propiedades es preciso dejarlo hervir un par de minutos más. Luego se apaga el fuego y se deja reposar 10 minutos. Cuando el tiempo haya transcurrido, la bebida está lista para el consumo.