Gato
Los gatos son conocidos por su comportamiento independiente y su gusto por la comida. Imagen de referencia. | Foto: Getty Images

Vida Moderna

¿Qué hacer si un gato no quiere comer?

La falta de apetito en los gatos puede ser preocupante, pero es esencial abordarla con calma y paciencia.

Redacción Semana
3 de octubre de 2023

La falta de apetito en los gatos puede ser causada por diversas razones y algunas de las más comunes incluyen:

1. Problemas de salud: Los problemas médicos pueden ser la razón más obvia por la que un gato no quiere comer. Estos pueden incluir infecciones, enfermedades dentales, problemas gastrointestinales, enfermedades crónicas como la insuficiencia renal o hepática, y cáncer. Cuando un gato está enfermo, puede perder el apetito debido al malestar general o al dolor asociado con la enfermedad.

2. Estrés o cambios en el entorno: Los gatos son criaturas de hábitos y pueden ser sensibles a los cambios en su entorno. Mudanzas, la adición de nuevos miembros a la familia, remodelaciones en el hogar o incluso cambios en la ubicación de la comida y la caja de arena pueden causar estrés en un gato y, como resultado, una pérdida de apetito.

gato tomando leche
La falta de apetito puede ser un síntoma de diversas enfermedades o problemas de salud. | Foto: Getty Images

3. Cambios en la dieta: Introducir una nueva dieta o cambiar abruptamente la comida de un gato puede llevar a una negativa a comer. Los gatos son notoriamente quisquillosos con la comida y pueden rechazar cualquier cosa que sea desconocida o diferente a lo que están acostumbrados.

4. Problemas dentales: El dolor dental, como la enfermedad de las encías o las caries, puede hacer que comer sea incómodo o doloroso para un gato. Como resultado, pueden evitar los alimentos sólidos y perder interés en la comida.

5. Medicamentos: Algunos medicamentos pueden tener efectos secundarios que incluyen la pérdida de apetito. Si tu gato ha comenzado un nuevo tratamiento médico, esto podría ser la causa de su falta de interés en la comida.

6. Enfermedades virales: Algunas enfermedades virales, como la gripe felina (o rinotraqueítis) y el calicivirus, pueden causar síntomas respiratorios que dificultan que los gatos disfruten de su comida debido a la pérdida de su sentido del olfato.

Dicho lo anterior, algunos consejos y pautas sobre qué hacer si el gato no quiere comer son:

1. Observar el comportamiento de tu gato: Antes de entrar en pánico, es importante observar el comportamiento general de tu gato. A veces, los gatos pueden pasar por períodos de falta de apetito debido a cambios en su entorno, estrés o simplemente un gusto temporal diferente. Si el gato parece saludable y está actuando de manera normal, es posible que no haya motivo de alarma.

gato comiendo carne
Nunca hay que intentar forzar a un gato a comer. | Foto: Getty Images/iStockphoto

2. Consultar a un veterinario: Si la falta de apetito persiste durante más de 24 horas o si el gato muestra otros signos de malestar, como letargo, vómitos, diarrea o pérdida de peso, es esencial que consultes a un veterinario.

3. Mantener una rutina: Los gatos son criaturas de hábitos y establecer una rutina de alimentación puede ayudar a mantener su apetito.

4. Cambia la comida gradualmente: Si se está tratando de cambiar la comida del gato, hay que hacerlo de manera gradual. Los gatos son notoriamente quisquillosos cuando se trata de su dieta.

5. Probar con diferentes alimentos: Si el gato rechaza su comida habitual, se puede probar con diferentes tipos y marcas de alimentos para gatos.

7. Utilizar utensilios adecuados: Algunos gatos son quisquillosos con los platos en los que se les sirve la comida.

Gato pelirrojo mirando a la cámara y lamiéndose la boca con una larga lengua rosada.
Cuando un gato no come lo suficiente, se arriesga a una serie de problemas de salud. | Foto: Getty Images

8. Ofrecer pequeñas cantidades con frecuencia: Si el gato no muestra interés en comer grandes porciones, hay que considerar ofrecerle comida en pequeñas cantidades a lo largo del día. Esto puede alentar al gato a picotear de manera más constante en lugar de dejar de comer por completo.

*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de Semana