Es común que durante el tratamiento tradicional los pacientes usen métodos complementarios como meditación, yoga, ejercicios espirituales, aromaterapia, entre otros, para manejar los efectos del cáncer y llevar mejor la enfermedad | Foto: .

SALUD

Bajo lupa los tratamientos “milagrosos” para el cáncer

La FDA advierte que 65 productos altamente comercializados que aseguran curar tumores carecen de base científica y de aprobación de las autoridades para ser distribuidos.

2 de mayo de 2017

Quienes han padecido de una enfermedad tan compleja como el cáncer entienden que es fácil ceder ante cualquier remedio que prometa aliviar el dolor o que brinde una esperanza de cura. Esta necesidad la han explotado empresas que publicitan terapias alternativas a medicamentos o cirugías para el tratamiento de padecimientos crónicos, pero que no son más que un fraude o un “cruel engaño”, como lo ha señalado la Administración de Medicinas y Alimentos de Estados Unidos, (FDA por sus siglas en inglés), al advertir sobre estos productos.

La máxima entidad de regulación de medicamentos emitió cartas de advertencia a 14 empresas norteamericanas que se dedican a comercializar cremas, infusiones, polvos, píldoras, ungüentos, aceites, gotas y jarabes que prometen curar, prevenir y descubrir el cáncer, con el fin de que corrijan esa publicidad engañosa o dejen de hacer afirmaciones fraudulentas sobre las propiedades de tales productos.

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Estas alternativas, que usualmente son anunciadas como “naturales” o vendidas bajo la etiqueta de suplementos alimenticios, no son inofensivas ya que pueden contener sustancias peligrosas que podrían interferir con el tratamiento tradicional del paciente. Así lo advirtió en un comunicado Douglas W. Stearn, director de la Oficina de Cumplimiento y Operaciones de Importación de la Oficina de Asuntos Regulativos de la FDA. “Los consumidores no deben usar estos productos o similares no aprobados, ya que pueden ser inseguros y podrían impedir que una persona tenga un diagnóstico o tratamiento adecuados para el cáncer que posiblemente pueda salvarle la vida”.

Es común que durante el tratamiento tradicional los pacientes usen métodos complementarios como meditación, yoga, ejercicios espirituales, aromaterapia, entre otros, para manejar los efectos del cáncer y llevar mejor la enfermedad. “El 80 por ciento de mis pacientes está en alguna terapia de ese estilo. Yo no les prohíbo porque eso puede ser una ayuda emocional, pero les dejo claro que no se van a curar con la medicina alternativa”, dice el oncólogo Carlos Castro de la Liga Colombiana Contra el Cáncer. Sustituir los tratamientos aprobados no solo pone en riesgo la vida, sino también la posibilidad de perder grandes sumas de dinero y tiempo. “Déjese hacer la quimio o la radio y si quiere complemente con eso, pero no lo reemplace”, complementa Castro.

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Sin una aprobación o autorización de entidades competentes como la FDA o el INVIMA, en el caso colombiano, que validen la seguridad y eficacia de los tratamientos, estos productos son verdaderamente peligrosos porque no hay cómo controlar sus efectos. La preocupación de la FDA es que el número de consumidores está creciendo gracias a que se comercializan fácilmente a través de internet y redes sociales.

Por eso, la agencia recomienda prestar atención al uso del lenguaje de estos distribuidores para poder identificar productos fraudulentos. Por ejemplo, se debería desconfiar si el producto asegura que trata todas las formas de cáncer; que elimina milagrosamente las células y los tumores cancerosos; que reduce el tamaño de los tumores malignos; que elimina de manera selectiva las células cancerosas; que es más eficaz que la quimioterapia y ataca a las células cancerosas, dejando intactas las células sanas, y la más grave de todas, que cura el cáncer.

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Algunas compañías notificadas ya están actualizando las descripciones de sus productos en todos los medios. Otras dejaron de ofrecer sus productos, pues de no corregirlas la FDA fue enfática en dejar claro que tomará medidas legales para impedir que estos productos lleguen a los pacientes.