Sylvia Escovar y Eric Basset

La bogotana Sylvia Escovar asumió el año anterior la presidencia de Terpel en reemplazo de Amaury de la Espriella, quien desempeñó este cargo por seis años. 

Cuando fue nombrada timonel de la compañía se venía desempeñado como vicepresidenta comercial. Antes fue vicepresidenta de Estaciones de Servicio, Negocios Complementarios y Lubricantes de Terpel. Ahora su gran reto –como señala la propia organización– es llevar a un nuevo nivel la experiencia de los consumidores en su red de más de 1.800 estaciones de servicio ubicadas desde La Guajira hasta el Amazonas.

Escovar, economista de la Universidad de los Andes, se propone hacer de Terpel un referente mundial de imagen y servicio.  Para ella los clientes son la razón de ser y el gran reto de esta organización que tiene más del 40 por ciento del mercado nacional. Pero administrar bien su tiempo es su otro desafío. Debe sacar momentos para compartir con sus tres hijos y hasta para sus dos pasatiempos: montar en bicicleta y cocinar.

Horst Paulmann, el presidente del grupo chileno Cencosud puso sobre los hombros de este abogado de la Universidad de Buenos Aires la responsabilidad de dirigir la llegada a Colombia de los supermercados Jumbo.

No solo se trata de cambiar el nombre de los Carrefour de Colombia, sino de la tarea de posicionar entre los colombianos una nueva marca con todo lo que ello significa. Aunque nació en Chile en 1974, Eric Basset ha pasado la mayor parte de su vida laboral en el extranjero. Hace 16 años, cuando ingresó a la compañía que adquirió los supermercados de Carrefour en el país, se desempeñó en el área de recibo de Easy en Argentina. 

En 2007 dirigió el equipo de esta marca que abrió operaciones en Colombia y hasta 2012 ocupó la gerencia. En Colombia también trabajó en las áreas logísticas, de operaciones y comercial, donde conoció al detalle las ventas al por menor. “Mi reto es posicionar la empresa en el corazón de los colombianos con una apuesta enfocada en la calidad, el surtido y el servicio”, dice. 

Le gusta el tenis, un deporte en el que, como en el retail, solo se gana con buenos movimientos.