La insistencia del presidente Gustavo Petro de enviar dardos a los que considera poderosos, llegó a los terrenos del sector de la vivienda.
En uno de sus habituales trinos, el mandatario se refirió a la razón por la cual había decidido trasladar recursos que antes eran para subsidio a la compra de vivienda nueva, para que ahora sean utilizados en mejoramiento.
Petro dijo que eso creaba malestar y se refirió puntualmente a “gremios poderosos acostumbrados a apropiarse del Ministerio de Vivienda”. Al respecto, el jefe de Estado manifestó que prefiere “incidir en un mundo más grande, de personas necesitadas de un mejor hábitat”.
Guillermo Herrera, presidente de Camacol, gremio de constructoras, al ser interrogado sobre dicho mensaje, hizo su pronunciamiento.
“En el país se necesita hacer de todo: vivienda nueva y mejoramiento. Lo importante es tener una discusión genuina, que busque resolver los problemas del país en los ámbitos sociales, económicos, la desigualdad, sobre todo el fraccionamiento territorial que cada vez está más acentuado”, indicó.
Acto seguido, manifestó que, por el contrario, lo que se ve es que “el gobierno no cumple”. Se refirió así a que la administración se había comprometido a una meta de 400.000 mejoramientos de vivienda en todo el país.
“El presidente dice que llevan 40.000, hace una semana la ministra de Vivienda (Helga María Rivas) decía que eran 18.000. Es decir, en el mejor de los casos van a llegar al 10 % de los 400.000″.
Con esas cifras en mano, Herrera concluyó que el gobierno, “como dicen por ahí, ni raja ni presta el hacha”.