Uno de los principales obstáculos a la hora de pedir un crédito, o en su defecto una tarjeta de crédito es estar reportado en centrales de riesgo, ya sea por el pago no oportuno de créditos o porque nunca se consonó completamente un crédito. En este caso, la vida crediticia del usuario queda limitada.
Ante esta circunstancia, hay bancos que han optado por prestarle a aquellas personas que se encuentran reportadas.
Algunos de los requisitos de estas entidades son menos rigurosos, aunque se encuentran con límites de crédito más bajos que las tradicionales. De acuerdo con Rankia, estas son algunas:
- Tarjetas de crédito prepago: No requieren historial crediticio y el usuario debe cargar previamente un saldo a la tarjeta.
- Tarjetas de crédito amparadas: Exigen un respaldo de un titular con buen historial crediticio.
- Tarjetas de crédito de entidades financieras especializadas: Empresas como Lineru y Solventa se enfocan en ofrecer tarjetas a personas con historial negativo.
Entre los documentos más solicitados para respaldar estos préstamos está presentar la cédula de identidad, extracto bancario de los últimos tres meses, declaración de renta del año anterior y certificación laboral.
Otras opciones
El usuario tiene otras opciones para seguir accediendo a la banca formal, entre esos los productos bancarios como tarjetas de crédito amparadas o tarjetas adicionales y préstamos de cantidades módicas de dinero.
El portal Rankia también asegura que otra de las opciones es buscar una compañía financiera que sea menos conocida o incluso buscar una plataforma fintech, las cuales se basan en esquemas de scoring y al momento de acceder pueden ser más flexibles al momento de ofrecer tarjetas para personas sin historial.
Tarjetas amparadas: ¿de qué tratan?
Estas tarjetas las ofrecen bancos como BBVA y Banco Davivienda. De acuerdo con la información de BBVA esta es una tarjeta de crédito con la que el titular comparte parte de su cupo disponible y los beneficios que disfruta, con otra persona. Estas tarjetas de crédito, en el caso de este banco, tienen exoneración de cuota de manejo durante doce meses y acceso sin costo a las asistencias de las tarjetas BBVA.
Características generales de estos créditos, según Rankia:
- El titular de la tarjeta de crédito (y posible amparador), previamente pasó y superó la evaluación crediticia, puede decidir solicitar una tarjeta amparada.
- El titular al amparar su tarjeta puede decidir el límite de crédito para la tarjeta amparada.
- Contrario a lo que se piensa el riesgo no lo corre el banco en cuánto a la persona reportada y que recibirá la tarjeta amparada, sino para el titular de la tarjeta de crédito ya que el estado de cuenta y los gastos que realicen con la tarjeta de crédito adicional será responsabilidad del tarjetahabiente.
- La persona amparadora es la responsable por la deuda generada por la tarjeta de crédito amparada, así que arriesga su historial crediticio si el amparado cae en impagos. Y si el amparado reportado sigue por mal camino con dicha tarjeta de crédito amparada, el titular de la tarjeta puede bloqueársela.
- Mientras que para la persona reportada el favor de tener una tarjeta de crédito amparada es como una segunda oportunidad para ser responsables.