Uno de los programas más representativos de esta compañía de logística, creada por Alejandra Salazar, es Mujer Semilla que promueve la apertura de posibilidades a mujeres, especialmente quienes son cabeza de hogar.
Más de 300 mujeres se ven beneficiadas con estabilidad profesional y financiera, a partir de la vinculación como prestadoras de servicio de transporte.
Gracias a esta iniciativa social, Alianza Logística ha prestado más de 209.000 servicios de transporte especializado, muchos de ellos en momentos críticos como la pandemia, apoyando al sistema de salud y a poblaciones vulnerables. Además, ha suscrito convenios de colaboración en los que se estipula que al menos el 50 por ciento de la ejecución debe estar a cargo de mujeres, promoviendo equidad de género en todos los niveles.
Alejandra Salazar, CEO de la organización, es clara en su visión: “Estoy convencida de que hacer empresa va mucho más allá de generar utilidades. Se trata de aportar valor a la sociedad. La pandemia nos obligó a repensar el modelo de negocio y hoy tengo absoluta certeza de que el desarrollo del talento humano es el verdadero motor de transformación”.
Educación para el desarrollo
Alianza Impulsa es otra de las estrategias de la compañía pensada para acompañar el desarrollo profesional de los colaboradores operativos. El programa combina formación, promoción interna y acceso a herramientas financieras con un enfoque de movilidad social y crecimiento personal.
A través de convenios con instituciones educativas se promueve el acceso a educación técnica y profesional para sus colaboradores. También ha abierto espacios para que jóvenes sin experiencia puedan ingresar al mercado laboral, dándoles formación y acompañamiento desde el primer día. El resultado: el 50 por ciento de quienes han ingresado al programa han sido promovidos dentro de la organización, pasando de cargos operativos a posiciones administrativas o liderando equipos regionales.
Otro componente clave del programa es la financiación para adquisición de vehículos propios por parte de los conductores. Esta iniciativa no solo mejora su estabilidad económica, sino que les permite evolucionar hacia una relación independiente con la empresa, convirtiéndose en aliados estratégicos dentro del ecosistema logístico de Alianza.
El impacto de este programa se refleja en historias concretas de transformación: colaboradores que comenzaron conduciendo un vehículo y hoy ocupan cargos directivos; jóvenes sin experiencia que hoy lideran equipos; familias que alcanzan una estabilidad económica real gracias a una oportunidad bien estructurada.
De cara al futuro, Alianza Logística trabaja en ampliar su red de alianzas, especialmente en regiones donde existen barreras de acceso al empleo formal. La meta es que más personas, sin importar su género, edad o formación previa, encuentren en esta compañía una puerta abierta al crecimiento, al aprendizaje y a la dignificación del trabajo.