El Consejo de Derechos Humanos de la ONU estableció, por primera vez, el viernes un mandato de Relator Especial encargado de vigilar la represión de los opositores en Rusia.

Los 47 Estados miembros del Consejo adoptaron una resolución en este sentido, propuesta por una gran parte de los países miembros de la Unión Europea, con 17 votos a favor, 24 abstenciones y seis votos en contra, entre ellos los de China, Cuba y Venezuela.

Antes de la votación, el embajador ruso ante la ONU en Ginebra, Guennadi Gatilov, exviceministro ruso de Asuntos Exteriores, criticó el texto y acusó a “los países occidentales de utilizar el Consejo con fines políticos”.

Moscú, que abandonó el Consejo en el momento en que la Asamblea General de las Naciones Unidas votó su expulsión hace algunos meses por causa de la invasión de Ucrania, tiene sin embargo la condición de observador y, como tal, puede expresarse en el Consejo.

La resolución, adoptada el día del 70º aniversario del presidente ruso Vladimir Putin, decidió nombrar un relator especial encargado de vigilar “la situación de los derechos humanos” por un período de un año.

Debe “recoger, examinar y evaluar la información pertinente de todas las partes involucradas, incluida la sociedad civil rusa, tanto dentro como fuera del país”.

“Desde hace años, asistimos a un continuo deterioro de la situación de los derechos humanos en la Federación de Rusia, que se aceleró en los últimos meses”, declaró el embajador de Luxemburgo Marc Bichler, al presentar el texto al Consejo.

Entre tanto, las fuerzas rusas reivindicaron este viernes sus primeras conquistas en el este de Ucrania tras una serie de reveses en varios frentes, pero Kiev parecía mantener sus posiciones e instó a los soldados rusos a rendirse.

El ministro de Defensa ucraniano, Oleksii Reznikov, en una muestra de la confianza de los ucranianos tras una serie de éxitos obtenidos durante su contraofensiva, prometió garantizar “la vida, la seguridad y la justicia” de los militares rusos que opten por capitular.

“Todavía pueden salvar a Rusia de la tragedia y al ejército ruso de la humillación”, o si no “quedar en la memoria como ladrones, violadores y asesinos”, arrojaron, después de que varias derrotas en el frente empujaron al presidente ruso, Vladimir Putin, a movilizar a centenares de miles de reservistas.

Por su parte, Moscú anunció que había conquistado tres pueblos del este de Ucrania tras haber perdido millas de kilómetros cuadrados en varios frentes en las últimas semanas.

Los separatistas prorrusos que combatieron junto a las fuerzas de Moscú en Ucrania afirmaron que habían tomado las localidades de Otradivka, Vesela Dolina y Zaitseve. El ministerio ruso de Defensa ya había anunciado la captura de Zaitseve la víspera, en su informe diario.

Los tres municipios están situados al sur de la ciudad de Bajmut, controlados por las fuerzas ucranianas y que el ejército ruso intenta conquistar desde hace meses, sin éxito.

Además. Este viernes, en Bajmut, los periodistas de la AFP escucharon disparos de artillería pesada y de lanzacohetes múltiples en el centro de la ciudad, que tenía unos 70.000 habitantes antes de la guerra.

También se escucharon ráfagas de ametralladoras de vez en cuando. Un voluntario civil del grupo humanitario Vostok SOS, Eduard Skorik, de 29 años, dijo a la AFP que cerca de su casa habían tenido lugar “combates callejeros”.

Al sur de la ciudad, yendo hacia los pueblos capturados por los rusos, se vieron humaredas negras causadas por obuses.

Las fuerzas ucranianas también reportaron victorias territoriales el viernes, como la aldea de Grekivka, en la región de Lugansk (este), según el gobernador, Serguéi Gaidai.

En la región ocupada de Jersón, en el sur, al menos cinco civiles fallecidos y otros cinco fueron heridos en un bombardeo ucraniano que alcanzaron un autobús que cruzó un puente y que llevaban civiles a bordo, camino al trabajo, indico el responsable prorruso Kirill Stremousov .

Las fuerzas ucranianas han atacado los puentes de esa región en varias ocasiones para impedir el suministro logístico de las fuerzas rusas.

La presidencia ucraniana informó además de un nuevo bombardeo ruso en la región de Zaporiyia (sur), por segundo día consecutivo, que causó un herido. “Se destruyeron infraestructuras en dos distritos. El ocupante quitó drones por primera vez”, dijo la fuente.

La víspera, 11 personas fallecieron en bombardeos rusos en Zaporiyia, según los servicios de rescate ucranianos.

*Con información de AFP