Donald Trump sostuvo, la semana pasada, que podría conversar con Venezuela en medio de crecientes tensiones en el Caribe, donde las fuerzas militares estadounidenses han bombardeado decenas de embarcaciones, presuntamente, narcotraficantes y donde han muerto más de 80 personas.
Pese a que el presidente anunció el posible acercamiento bilateral, dijo que no descarta una operación dentro del país latinoamericano, lo cual también tiene el objetivo de presionar a Nicolás Maduro para que entregue el poder.
Sin embargo, un funcionario del Gobierno de Trump declaró al medio Axios que el mandatario tiene la disposición de hablar con el dictador sobre los ataques en el mar del Caribe.
“Nadie planea entrar y dispararle o secuestrarlo, en este momento. No diría nunca, pero ese no es el plan en este momento“, dijo el funcionario.
“Mientras tanto, vamos a hacer estallar barcos que transporten drogas. Vamos a detener el narcotráfico”, complementó.
Sus comentarios se dan el mismo día, este lunes 24 de noviembre, que el Departamento de Estado designó al Cartel de los Soles como una “Organización Terrorista Extranjera”, lo que le da pie a las fuerzas norteamericanas de combatir en la nación sudamericana.
Al mismo tiempo, el Gobierno de Trump ha señalado a Maduro de liderar aquel cartel. Por lo que, además de considerarlo ilegítimo, la administración norteamericana pretende llevarlo hasta la justicia de Estados Unidos.
Otro funcionario declaró a Axios que, aunque no se ha establecido una fecha para la llamada entre Trump y Maduro, esta reunión está en “fase de planificación”.
“Los diplomáticos nos dicen que Maduro le dirá (a Trump): ‘Confíen en mí. Tendré nuevas elecciones en tres años. Pueden venir y quedarse con todo el petróleo. Dejaré de enviarlo a Rusia’”, siguió en su entrevista.
“Ha dicho muchas cosas así durante años y nunca cumple su promesa. Así que los diplomáticos nos dicen que debemos desconfiar”, agregó.
Días atrás, frente a la sugerencia del estadounidense de establecer conversaciones, Maduro también se mostró abierto al diálogo.
“Cualquiera que quiera hablar con Venezuela hablará cara a cara”, dijo el dictador en medio de una aparición televisada. “Reafirmamos que solo a través de la diplomacia deben los países y Gobiernos libres entenderse, y solo a través del diálogo deben buscar puntos en común en temas de interés mutuo”.
“El diálogo es el camino para buscar la verdad y la paz, y esa paz no tiene alternativa”, aseguró entonces.
Preocupaciones si Maduro entrega el poder
Los funcionarios consultados por Axios expresaron que, en caso de que el dictador abandone el poder, una de las preocupaciones es que sus “manejadores cubanos podrían ejecutarlo si cede a la presión estadounidense y renuncia”.
El régimen venezolano ha aportado al fortalecimiento de la dictadura cubana que, a su vez, le ofrece seguridad a Maduro y contribuyó en su victoria presidencial del 2013, la cual lo mantiene al mando.
Un artículo de The Financial Times informó que al dictador le inquieta que uno de sus funcionarios pueda volverse en su contra, debido a los salarios en disminución y una recompensa por él que radica en 50 millones de dólares.