Este mismo caso tiene a un abogado y un fiscal de la Justicia Especial para la Paz, Carlos Bermeo, en líos con la justicia. Se trata de los millonarios ofrecimientos en dólares que tenían como objetivo frenar la extradición de Jesús Santrich, el extinto jefe guerrillero, que en ese momento estaba procesado por narcotráfico. El excongresista Luis Alberto Gil, después de varios años de investigación y de declararse inocente, terminó por aceptar su responsabilidad.

La condena contra el excongresista incluyó los delitos de concierto para delinquir agravado, cohecho propio y tráfico de influencias, que derivaron en una pena de cuatro años y medio de prisión. " Ese reconocimiento fue avalado por la juez de conocimiento, quien lo declaró responsable de las citadas conductas delictivas, en calidad de cómplice”, dijo la Fiscalía en un comunicado al advertir la condena contra el excongresista.

El operativo de captura del exsenador quedó en varios videos y hasta seguimientos de agentes encubiertos, cuando en un hotel en el norte de Bogotá se comprometían a cambio de una millonaria suma de dinero en dólares, frenar, según la versión de los investigadores, la extradición del exjefe guerrillero. En esa reunión donde cambiarían información por dólares, estaban otras tres personas que en ese momento también fueron judicializadas.

“Al verificar el material de prueba y los argumentos presentados por la Fiscalía General de la Nación, el Juzgado Noveno Penal Especializado de Bogotá condenó a cuatro años y medio de prisión al excongresista Luis Alberto Gil Castillo por su participación en una red criminal que ofrecía sus servicios para interceder o entregar información privilegiada de procesos judiciales y administrativos”, dijo la Fiscalía.

“En el momento del procedimiento, estaba reunido con otros señalados integrantes de la organización ilícita que negociaban con una tercera persona distintas acciones y maniobras para congelar o dilatar un trámite relacionado con la extradición a Estados Unidos de Seuxis Pausias Hernández Solarte, alias Jesús Santrich”, señaló la Fiscalía en la diligencia que fijó el acuerdo y la condena contra el exsenador.

El exsenador se presentó ante el juzgado para escuchar la condena que incluyó una multa de 1.424 salarios mínimos legales mensuales vigentes e inhabilidad para el ejercicio de funciones públicas por cinco años. Luis Alberto Gil fue capturado y después de varios meses fue beneficiado con la libertad condicional, que mantendrá por el monto de la pena, previo cumpliento de unos requisitos.

El material probatorio recaudado por la Fiscalía permitió concluir la responsabilidad del exsenador en las conductas criminales que fueron investigadas por la Fiscalía y que lo dejan en el lugar, hora y fecha de los ofrecimientos para evitar la extradición del exjefe guerrillero a los Estados Unidos, en el marco del proceso adelantado por el delito de narcotráfico.