A pesar de que el Gobierno Nacional, a través del ministro de Justicia, Eduardo Montealegre, confirmó que el Tren de Aragua no haría parte de las mesas de negociación en el marco de la ley de paz total, esta organización criminal advirtió que sus voceros están listos para construir los puentes con el propósito de vincularse a ese proyecto del Gobierno.
El abogado Gustavo Moreno, quien representa a algunos de los voceros de esta organización criminal, aseguró que sus clientes están listos para participar en mesas de negociación y que el Gobierno debería tener en cuenta esa solicitud en el propósito de alcanzar la paz, incluso con estos grupos criminales.
“Larry Changa, fundador del Tren de Aragua, ha sido designado por esta organización al margen de la ley, con presencia transnacional, como vocero para que, en el marco de la ley 2272 de 2022, entable mesas de diálogo con el Gobierno Nacional para la construcción de una paz total. Estas mesas de diálogo son importantes porque la paz no se construye con silencios”, dijo el abogado.
El ministro de Justicia aseguró que no van a permitir en el Gobierno que, bajo el pretexto de participar en el proceso de paz total, integrantes de grupos criminales transnacionales —ampliamente conocidos y señalados de cometer crímenes de lesa humanidad— hagan parte de las negociaciones. Es una directriz del propio presidente de la República.
“El país debe tener la tranquilidad que no vamos a permitir, so pretexto de participar en los procesos de paz, que los grupos delincuenciales se burlen de la justicia internacional para buscar la impunidad de sus crímenes”, insistió Montealegre.
La iniciativa de supuestamente participar de las mesas de negociación se conoció luego de que SEMANA reveló una carta del mismo Larry Changa, en la que advertía su intención de incluirse en el proceso de paz total del Gobierno nacional, una propuesta que de inmediato fue rechazada por el Ejecutivo.
“Como uno de los tres fundadores y vocero autorizado de la denominada banda criminal Tren de Aragua, me dirijo a ustedes con el debido respeto para expresar mi voluntad y la de nuestra organización de colaborar con el Estado colombiano en iniciativas de carácter social, preventivo y de reinserción, que contribuyan a reducir la violencia y la influencia de organizaciones criminales que afectan a comunidades vulnerables y a la población migrante”, se lee en la propuesta firmada por Larry Amaury Álvarez.
Los informes de inteligencia advierten que el Tren de Aragua, como organización criminal, tiene diferentes facciones e incluso cabecillas, por lo que designar un solo vocero para todo el grupo al margen de la ley resulta un asunto complejo de digerir. “Son tantos los delincuentes que se asocian a esa razón social que incluirlos a todos en la misma bolsa es difícil de creer”, señalaron los investigadores.