El ataque sicarial contra dos activistas venezolanos en Bogotá encendió las alarmas sobre la persecución transnacional que viven los opositores al régimen de Nicolás Maduro.
Desde la clínica, Luis Peche, el consultor político que recibió impactos de bala en ese ataque, hizo un llamado:
“Hacer política, defender derechos humanos o hasta opinar sobre lo que pasa en Venezuela puede ser causa de asesinato, ya no solo dentro del país”, aseguró.
Peche narró que, junto con su “hermano de vida, Yendri Velásquez, lo vivimos en carne propia. Todavía lo estoy procesando, pero lo más importante es que afortunadamente estamos contándolo. Gracias a todos los que han escrito. No nos detendremos”.
Ambos resultaron heridos al ser atacados a disparos el lunes en Bogotá, están siendo atendidos en un hospital.
Ana Karina García, directora de Juntos se Puede, narró a SEMANA la historia de ambos activistas. "Las dos personas que fueron víctimas de este atentado son dos perseguidos políticos venezolanos. Cada uno llegó a Colombia en fechas distintas”, dijo.
Sobre Yendri Velázquez, aseguró que “llegó hace casi un año tras haber vivido una detención en Venezuela. Logramos que saliera de la cárcel por la presión internacional, ya que él es un defensor activo de la comunidad LGBTI. Hoy en día, es miembro de Amnistía Internacional, trabaja para esa organización y es solicitante de refugio. No hemos recibido respuesta por parte de la Cancillería a esa solicitud de refugio”.
De Peche, contó que “es activista de Voluntad Popular y consultor político. Ha trabajado en temas de consultoría de comunicaciones y tiene un proyecto que se llama Monitor 58, el cual hace monitoreo de las noticias y análisis internacional. También viene de la lucha política venezolana, ha sido perseguido en Venezuela y está en Colombia buscando protección. Él es colombo-venezolano, porque a través de sus padres obtuvo su nacionalidad hace un par de semanas”.
Luis Alejandro Peche y Yendri Velásquez se disponían a tomar un transporte público en el norte de Bogotá cuando dos sujetos les dispararon, según un informe preliminar de la policía.
“Le pedimos a las autoridades colombianas y al gobierno del presidente Gustavo Petro una investigación exhaustiva, transparente y urgente que permita esclarecer los hechos, identificar a los responsables y garantizar justicia”, añadió Machado en X.
Según la Defensoría del Pueblo, Velásquez es “defensor de derechos humanos, activista LGBTIQ+ y solicitante de refugio en Colombia”.
El presidente Gustavo Petro indicó que reforzará la protección de los defensores de derechos humanos “de cualquier país del mundo en Colombia”.
“Toda la ciudadanía venezolana que quiera asilarse en Colombia, independiente de sus ideas, es bien recibida (…) Nadie puede decir que el gobierno los ha molestado, cualesquiera sean sus ideas. Se han expresado libremente y así continuará”, dijo el mandatario.
El presidente fue criticado por poner un manto de duda sobre el ataque al decir al final de su trino que “sabemos qué buscan los violentos en este caso. Sabemos de la reunión en Cúcuta de las mafias coordinadas. A quienes quieran la paz se les dará la mano, los demás serán enfrentados con contundencia”.
Imágenes compartidas por la policía muestran el hallazgo del vehículo donde estaban los agresores, con dos pistolas al interior. Los sicarios no han sido ubicados.
La Defensoría pidió a la Fiscalía “esclarecer los hechos”.
“El pueblo venezolano merece vivir en paz y democracia. Mientras se encuentren en territorio colombiano, las personas migrantes y refugiadas deben contar con el respaldo y acompañamiento de las autoridades”, indicó la entidad en X.
Colombia ha recibido a casi tres millones de migrantes venezolanos y es el principal receptor de este éxodo que huye de la crisis política y social en su país.
Petro no reconoció las elecciones en las que Maduro fue reelegido, pero mantiene relaciones diplomáticas con Venezuela y se muestra del lado de Caracas ante el despliegue militar de Estados Unidos en el Caribe.
El mandatario cuestionó la concesión del Nobel de Paz a Machado, debido a una carta que esta envió en 2018 al primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, y también por sus estrechos vínculos con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
*Con información de AFP