La Secretaría de Seguridad y Justicia de Cali conoció que varias agencias de viajes de la ciudad han sido objeto de amenazas por el incumplimiento de la empresa Viva Air a sus clientes.
En tal sentido, la dependencia de la Administración Municipal indicó la ruta de atención para denunciar este tipo de comportamientos que podrían afectar la vida, integridad y bienes.
Al respecto, Manuel Trochez, coordinador de la Oficina de Protección al Consumidor en Cali, manifestó que ese despacho rechaza cualquier tipo de amenaza por el cese de operaciones de la aerolínea Viva Air.
“Nos solidarizamos con los funcionarios y dueños de las agencias de viajes y turismo. Les queremos indicar que cuando la amenaza no persigue fines terroristas se constituye en un comportamiento contrario a la convivencia, según lo establecido en el artículo 27 de la Ley 1801 del 2016, Código de Seguridad y Convivencia Ciudadana”, subrayó.
El funcionario indicó que las personas víctimas de intimidaciones deberán dirigirse a la estación de Policía más cercana al lugar de ocurrencia de los hechos amenazantes, para que sean las autoridades quienes impongan las medidas correctivas necesarias y, de ser el caso, garanticen la protección de la vida y la integridad de estas personas.
Desde la suspensión de operaciones de Viva Air, a finales de febrero de 2023, la Oficina de Protección al Consumidor, de la Secretaría de Seguridad y Justicia de Cali, ha atendido más de 120 requerimientos de los usuarios afectados por la situación de la aerolínea de bajo costo. Por ello inició los respectivos procesos ante la Superintendencia de Industria y Comercio por la presunta vulneración de los derechos de los consumidores.
Con las quejas reportadas por los usuarios, la entidad desarrolló un informe técnico y uno jurídico que, junto con una denuncia colectiva, se radicó ante la Superintendencia de Transporte solicitando la imposición de la máxima sanción para estos casos, la cual corresponde a una multa de 2.000 salarios mínimos. Actualmente, se está a la espera de una respuesta por parte del ente de orden nacional.
Entretanto, la suspensión de operaciones de la aerolínea Ultra Air desde las 00:00 del jueves 30 de marzo tiene en vilo a cientos de pasajeros que tenían todo listo pasa viajar.
Los pasajeros de Cali, la capital del Valle del Cauca, no son la excepción. Es por eso que la Secretaría de Seguridad y Justicia de esta ciudad, por medio de la Oficina de Protección al Consumidor, habilitó una línea de atención para guiar a los afectados.
“A través de esta línea, los consumidores podrán interponer sus denuncias y ser asesorados por nuestros abogados para que les indiquemos el paso a seguir”, aseguró la Oficina de Protección al Consumidor.
La atención será prestada vía WhatsApp en el número 3160175600. “Acompañaremos permanentemente a los consumidores y buscaremos las estrategias para que los caleños no salgan afectados en esta crisis”, agregó dicha dependencia.
Asimismo, recordó que la aerolínea dispuso canales para que los pasajeros hagan sus solicitudes y que las peticiones deben ser contestadas en un plazo máximo de quince días hábiles contados a partir del momento de la radicación.
De acuerdo con la aerolínea, “hace un año inició operación, la única aerolínea comercial regular de capital colombiano, con una propuesta amigable, alegre y moderna, Ultra Air llegó para atender un segmento del mercado que antes no podía volar debido a los altos costos de este servicio esencial”.
De igual manera, durante el tiempo que funcionó, la aerolínea transportó más de dos millones de pasajeros, conectó las principales ciudades del país, ganó más del 8 % de participación del mercado aéreo colombiano y generó más de 1.200 puestos de trabajo directos e indirectos.
Sin embargo, “situaciones macroeconómicas adversas para la industria, como el incremento en el costo del combustible y la tasa de cambio, generaron un alza sustancial de costos para las aerolíneas, lo que conllevó a operar deficitariamente durante los últimos meses”.
Adicionalmente, la suspensión de operaciones de la tercera aerolínea más grande del país puso en alerta a los proveedores de la industria y a los arrendadores de aeronaves, quienes empezaron a exigir pagos inmediatos, e incluso prepagos, de los insumos y servicios necesarios para la operación, lo cual no es usual en esta industria.