Víctima y poeta

19 de enero de 2013

El discurso del recién reelegido Alejandro Ordóñez en su segunda posesión no fue rutinario. El procurador  se presentó como víctima del delito de opinión y denunció una persecución en su contra que denominó “‘bullying’ mediático”. Según él, este término se refiere al intento de sus contradictores de “apocar, reducir, aplanar, amedrentar, excluir socialmente e intimidar emocional e intelectualmente a la víctima”. Después de hacerle un elogio y un agradecimiento a su esposa describiéndola como una “costeña santanderianizada”, terminó cuestionando el proceso de paz en los siguientes términos: “Presidente, estaré muy vigilante de los acuerdos a los que se llegue en La Habana”.