El futuro es ‘Infinitum’

Diversas generaciones caminan cada día por los pasajes y las calles de Chapinero. Jóvenes estudiantes y personas mayores que siempre han vivido allí confluyen en una zona destacada por su vida residencial, académica, gastronómica y nocturna. Aunque el sector inmobiliario veía con buenos ojos este sector, ninguna compañía había apostado con fuerza por una iniciativa renovadora sobre la Avenida Caracas, arteria esencial del transporte público en Bogotá.

Con su proyecto Infinitum, la constructora Oikos lidera la renovación urbana y busca atraer inversión y visitantes a esta parte de la localidad. Infinitum se ubica en la Caracas con calle 58, una posición estratégica cerca de centros empresariales, comerciales, financieros y académicos. Consta de dos torres. La sur con 29 pisos y la norte con 24, para un total de 367 apartaestudios en construcción que se entregarán en 2018. El primero y el segundo piso cuentan con una zona de comercio y una plazoleta de comidas. Los pisos 3 y 4 están dedicados a los parqueaderos y a partir del piso 5 se ubica la zona residencial. La vista de la ciudad desde los apartaestudios es imponente, y el diseño de la construcción, innovador.

Aunque durante la segunda mitad del siglo XX este sector de Chapinero pasó de residencial a comercial, el objetivo es que la zona vuelva a reconocerse como un polo de desarrollo urbano tradicional, característica que compartió con localidades como Santa Fe, La Candelaria y Teusaquillo. Lo interesante de Infinitum es que mezcla los dos escenarios, como explica su directora comercial, Claudia Estefan: “El proyecto Oikos Infinitum cuenta con una zona comercial muy atractiva, con grandes ventajas para los clientes en movilidad dentro de la ciudad y valorización de su patrimonio. Puedo decir que desde el inicio de la obra se empezó a ver el cambio en la zona”.

Los compradores han valorado esta apuesta. "Decidí comprar porque estaba en una etapa de mi vida en la que solo me faltaba una inversión a largo plazo. La forma de pago, el espacio, el sector y la trayectoria de Oikos me dieron confianza", cuenta Pamela Franco, una joven que ahora, con poder adquisitivo para aventurarse a vivir sola, decidió creer en la renovación urbana de la localidad.

En la Grecia antigua el término ‘oikos‘ se refería precisamente a ‘casa‘. En aquella época varios oikos constituían unidades con las que se podía organizar la economía. Algo parecido a lo que sucede en Chapinero, esa pequeña ciudadela donde caben todos.