Buena alimentación, mejor desempeño

Uno de los mayores retos que enfrenta el sistema educativo en Colombia es la deserción escolar. De acuerdo con el Ministerio de Educación, cada año más de 300.000 niños y adolescentes abandonan el colegio.

Para evitar este fenómeno, que impide a esos niños y jóvenes construir un futuro próspero, el ministerio creó el Programa de Alimentación Escolar (PAE) como una política nacional que garantice la permanencia de los estudiantes en las aulas. “Esto debido a que para muchas familias de escasos recursos, el tema de la alimentación es difícil”, sostiene Yised Baena Aristizábal, secretaria de Educación de Rionegro. La ciudad tiene 18.000 estudiantes distribuidos en 16 instituciones educativas organizadas en 41 sedes.

Sin embargo, el ministerio provee unos recursos limitados y los gobiernos municipales deben priorizar a los alumnos que recibirán el beneficio. Al comenzar la administración del alcalde Andrés Julián Rendón, el ministerio aportaba 2.000 millones de pesos para entregar 7.000 raciones diarias y el municipio no hacía ningún aporte. Pero en esta administración, la Alcaldía destinó recursos que aumentaron en más de 80 por ciento esa suma, de modo que todos los niños de las instituciones educativas públicas accedieran al servicio.

Hoy, la Alcaldía destina 9.000 millones de pesos adicionales para entregar 22.000 raciones diarias que incluyen no solo almuerzos para los niños y jóvenes que estudian en jornada única, sino un refrigerio para aquellos que continúan su educación en jornadas complementarias. Por otro lado, el PAE mide el peso y la talla de los estudiantes con el fin de llevar un juicioso seguimiento a su nutrición desde que comienza el año escolar.

Los expertos que desarrollan las pruebas antropométricas descubrieron que en las vacaciones los alumnos sufrían cambios: regresaban a la escuela con obesidad por mala alimentación en los hogares, o desnutridos debido a la difícil situación económica de sus familias. Por ello, además del incremento en la cobertura del PAE en el municipio, la Alcaldía destina 5.000 millones de pesos más para ofrecerle a cada estudiante un paquete nutricional durante las vacaciones. “De esta manera nos aseguramos de que ellos tengan alimentación de calidad todo el año, y no únicamente en el colegio”, afirma Baena.

Entre otros productos, el kit diseñado por nutricionistas de la Secretaría de Educación incluye panela, atún, aceite, arroz, huevos, espaguetis y mazamorra, además de un recetario. En la primera semana de abril de este año entregaron 17.000 paquetes; en la segunda de julio, 16.300, y en la última de septiembre, 16.000. Debido a estos mejoramientos y compromisos, el Ministerio de Educación le otorgó al gobierno municipal el año pasado reconocimientos por el fortalecimiento de los procesos técnicos del PAE y su gestión administrativa.

La Secretaría de Educación se asegura de que los estudiantes reciban alimentos de excelente calidad por medio de unos operadores que prestan el servicio de catering. Cada año se adelantan los trámites y contratos de rigor para que desde una gran planta se distribuyan comidas y bebidas para todas las instituciones, de manera que lleguen en muy buenas condiciones a los estudiantes.