El presidente estadounidense Donald Trump se negó durante semanas a usar tapabocas
El presidente estadounidense Donald Trump se negó durante semanas a usar tapabocas | Foto: AP

MUNDO

Las dudas sobre el tratamiento que recibió Trump contra la covid-19

Expertos se preguntan si el mandatario recibió dosis de un medicamento experimental tras recomendación científica o por una orden directa a sus médicos.

8 de octubre de 2020

A principios de esta semana, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, salió del hospital tras haberse contagiado de coronavirus. En su momento, médicos de la Casa Blanca anunciaron que el mandatario recibió un tratamiento con corticoesteroide dexametasona, que según estudios reduce las posibilidades de morir en pacientes con máximas complicaciones.

De hecho, la Organización Mundial de la Salud recomienda su uso solo para “pacientes con covid-19 en estado grave y crítico”.

Posteriormente, en conferencia de prensa el domingo, el cuerpo médico que atendía al presidente reveló que Trump requirió oxígeno adicional luego de que descendiera el nivel de oxígeno en su sangre.

También se conoció que fue tratado con una terapia experimental contra la covid-19: anticuerpos sintéticos desarrollados por el laboratorio Regeneron.

Inyectados en el cuerpo de un paciente, esos anticuerpos sintéticos pueden fundirse en el virus para neutralizarlo, como se supone que debe hacer el sistema inmunológico.

Según el biólogo Michael Buchmeier, profesor de la Universidad de California, la presencia de estos anticuerpos en esta etapa podría significar que la infección “ha estado presente en el paciente por más tiempo del anunciado”.

Pasaron seis días desde su diagnóstico y el miércoles Trump volvió a trabajar en la de la Casa Blanca, haciendo caso omiso de las advertencias sobre los riesgos de contagio.

Sin embargo, expertos del MIT han puesto en duda la eficacia del tratamiento que el jefe de Estado recibió. En la MIT Technology Review, Charlotte Jee recordó que, al ser un hombre con sobrepeso y 74 años, el presidente estadounidense tiene un riesgo alto de desarrollar un caso grave de la enfermedad.

Pese a esto, nadie sabe con certeza “si los médicos le están administrando el cóctel de medicamentos en función de su propia evaluación médica o si Trump les ha ordenado que lo hagan”.

En el artículo de la prestigiosa universidad, se explica también que la dosis del tratamiento de anticuerpos que le fue aplicada el pasado viernes es “experimental y no aprobada, no está disponible para la gente corriente”.

El fármaco lo fabrica Regeneron y “está diseñado para imitar una respuesta inmunológica fuerte para evitar un estado grave por la covid-19. Los científicos no han estudiado el impacto que el uso de todos estos medicamentos a la vez podría tener en su efectividad”.

En medio de las dudas, lo cierto es que tras menos de una semana Trump salió radiante del centro médico Walter Reed en Maryland.

Los costos del medicamento, reveló el diario The New York Times, superaron los 100.000 dólares. “El presidente Trump pasó tres días en hospital. Llegó y se fue en helicóptero. Hizo una gran cantidad de pruebas de coronavirus, recibió oxígeno, esteroides y tratamiento experimental con anticuerpos. Para alguien que no es presidente, esto costaría más de 100.000 de dólares en el sistema de salud estadounidense”, publicó el periódico.

En el MIT dan crédito a la teoría que apunta a que Trump contrajo el coronavirus a través de su ayudante Hope Hicks, aunque no se descarta como “hecho de gran propagación” un evento en la Casa Blanca el pasado 26 de septiembre, pues al menos siete de las personas que asistieron dieron positivo.

El comportamiento del mandatario, criticado desde hace meses por su gestión de la pandemia, es escudriñado aún más cuando aumentan los casos de coronavirus entre empleados, asesores y periodistas en la Casa Blanca.

Según un alto funcionario, Trump estuvo con un número “extremadamente limitado” de asesores en el famoso despacho. Y entró por la puerta que da a los jardines, para no atravesar los pasillos del Ala Oeste, la zona de oficinas presidenciales de la mansión.

“Me acaban de informar sobre el huracán Delta”, tuiteó Trump, ansioso por mostrarle al país su dedicación al cargo, a 27 días de unas elecciones que prometen ser muy difíciles para él frente a Biden, líder en las encuestas.

Trump ya provocó una controversia al regresar a la Casa Blanca el lunes por la noche tras pasar tres días en un hospital en las afueras de Washington.

En una puesta en escena triunfal transmitida en vivo por televisión, el mandatario de 74 años se bajó del helicóptero Marine One y subió las escaleras hacia el balcón de su residencia. Allí, se quitó la máscara y saludó con los pulgares hacia arriba, en un extraño gesto desafiante.

“No le tengan miedo al covid”, había tuiteado unas horas antes desde el hospital, provocando consternación en la comunidad médica. Estados Unidos tuvo un promedio de 700 fallecidos diarios la semana pasada.

Con información de MIT Technology Review y AFP.