Conquistando a mi suegro

Título original: Guess Who.
Año de producción: 2005.
Director: Kevin Rodney Sullivan.
Actores: Bernie Mac, Ashton Kutcher, Zoe Saldana, Judith Scott, Kellee Stewart.

Esta comedia depende, en últimas, de qué tanto nos convenzan las actuaciones de sus dos protagonistas. Aparte de ver cómo chocan las personalidades cinematográficas de Ashton Kutcher y Bernie Mac (eso sí: es curioso descubrir que las tienen), no hay nada más que pueda convencernos de que ha valido la pena ver una producción que del comienzo al final lleva a pensar en la palabra 'desechable'. Conquistando a mi suegro empieza cuando una mujer de raza negra llamada Theresa les presenta a sus padres a su novio, el idealista Simon Green, sin haberles advertido antes que es un hombre blanco. A partir de ese momento, en la exitosa tradición de La familia de mi novia, nos veremos obligados a bajar la guarda para reírnos (y ni siquiera así nos reiremos tanto) de los malos ratos que pasa aquel tipo indefenso por cuenta de su propia torpeza y de la mirada implacable de su futuro suegro.

Convertir en un único chiste el agotador clásico del cine Adivina quién viene a cenar (1967), en el que una mujer blanca llegaba a casa de sus padres con un novio de raza negra, tiene algo de crimen. Pero no es este atrevimiento, la osadía de volver broma un drama de fondo, ni el sorpresivo recurso de transformar al novio negro en novio blanco sin tomarse en serio la crítica al racismo, lo que hace de este relato otra comedia norteamericana de esas que podemos perdernos sin perdernos nada. Son las actuaciones indecisas de Kutcher y Mac, a veces histéricos, a veces anestesiados, las que nos prueban que los realizadores sólo tenían claras las ganas de hacer dinero.