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Oración por los hijos
La oración es una poderosa herramienta para pedir a Dios por la felicidad de los hijos. | Foto: Getty Images

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Poderosos versículos de la Biblia para pedir que un niño sea obediente

Los padres también piden por ellos, para tener el mejor método de crianza.

Redacción Cultura
24 de octubre de 2023

Colombia se caracteriza por ser un país muy religioso, por lo que muchas personas ya sean cristianas, católicas o más, piden a través de la oración por muchas razones: salud, prosperidad, abundancia, trabajo, estudio, entre otros.

Los padres creyentes piden a Dios por sus hijos para que el ser divino los proteja de cualquier daño o peligro. Es por esto que a través de la oración buscan la guía espiritual para que los hijos estén seguros y saludables en todo momento.

Old Bible
Versículos de la biblia. | Foto: Getty Images/iStockphoto

Se tiene conocimiento de que ser padre es un gran reto y desafío, por lo que también le piden a Dios sabiduría y orientación para guiar a los niños y niñas de manera correcta y tomar decisiones que vayan acorde a lo que se les quiere enseñar día a día.

Versículos de la Biblia para pedir por los niños

  • Tito 3:1

Recuérdales que se sujeten a los gobernantes y autoridades, que obedezcan, que estén dispuestos a toda buena obra.

  • 1 Timoteo 2:1-2

Exhorto ante todo, a que se hagan rogativas, oraciones, peticiones y acciones de gracias, por todos los hombres; por los reyes y por todos los que están en eminencia, para que vivamos quieta y reposadamente en toda piedad y honestidad.

Lo que dice de los diezmos y las ofrendas en la Biblia.
Lo que dice de los diezmos y las ofrendas en la Biblia. | Foto: Getty Images
  • Salmos 22:28

Porque de Jehová es del reino, y él regirá las naciones.

  • Romanos 13:1-4

Sométase toda persona a las autoridades superiores; porque no hay autoridad sino de parte de Dios, y las que hay, por Dios han sido establecidas. De modo que quien se opone a la autoridad, a lo establecido por Dios resiste; y los que resisten, acarrean condenación para sí mismos. Porque los magistrados no están para infundir temor al que hace el bien, sino al malo. ¿Quieres, pues, no temer a la autoridad? Haz lo bueno, y tendrás alabanza de ella; porque es servidor de Dios para tu bien. Pero si haces lo malo, teme; porque no en vano lleva la espada, pues es servidor de Dios, vengador para castigar al que hace lo malo.

La biblia tiene muchos versículos de la abundancia.
La biblia tiene muchos versículos de la abundancia. | Foto: Getty Images
  • 1 Pedro 2:13-15

Por causa del Señor someteos a toda institución humana, ya sea el rey, como a superior, ya a los gobernadores, como por él enviados para castigo de los malhechores y alabanza de los que hacen bien. Porque esta es la voluntad de Dios: que haciendo bien, hagáis callar la ignorancia de los hombres.

  • 1 Pedro 2:18

Criados, estad sujetos con todo respeto a vuestros amos; no solamente a los buenos y afables, sino también a los difíciles de soportar.

Oración para pedir por los hijos

Padre tú eres la máxima autoridad y el único que ejerce el dominio sobre todo, pues eres Santo y sublime. Me acerco a ti porque no hay Dios como tú, eres y serás el mayor ejemplo de obediencia a tu voz y a tus preceptos, porque reconozco que esa es la única manera que podré tener una vida en total plenitud. Espíritu Santo ayúdame a practicar tu palabra y no ser tan solamente un oidor engañándome a mí mismo, sino meditar en ella para entender que aún en medio de tropiezos, debilidades, tú estás conmigo. Tu palabra dice: “Sométase toda persona a las autoridades superiores; porque no hay autoridad sino de parte de Dios, y las que hay, por Dios han sido establecidas”. Señor, enséñame a ser sujeto a las autoridades que has delegado para mi vida tanto las terrenales como las espirituales. Quiero aprender a tener un corazón lleno de gratitud, obediencia y humildad para reconocer mis fallas de manera que para mí lo más importante sea querer agradarte, que en mi corazón se de una obediencia genuina de manera que mis acciones sean las que hablen y no mis palabras. En el nombre de Jesús. ¡Amén!