Economía
Sueño de conectar a Bogotá y Medellín en menos de cinco horas no se hará realidad. ANI rechazó proyecto, ¿qué pasó?
Se trataba de una iniciativa privada, la cual no superó las evaluaciones y exigencias técnicas.
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Uno de los proyectos viales más esperados para conectar Antioquia con el centro del país fue rechazado por la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI). Se trata de la Ruta del Agua, que buscaba desarrollar una nueva vía entre el municipio de Santuario (Antioquia) y el sector de Caño Alegre, en Puerto Boyacá, donde se conecta con la Ruta del Sol, tramo que hace parte de la vía Bogotá – Medellín.
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El objetivo era conectar el centro del país con el Caribe, cruzando por Antioquia y los cálculos, planteados en una cumbre a principios del año pasado, establecían que el recorrido desde Bogotá hacia Medellín sería de cinco horas menos de las que hay actualmente, el cual es de ocho a diez horas, en un tramo que cubre cerca de 460 kilómetros por vía terrestre.
En momentos en que es clave el desarrollo de la competitividad del país, esta obra, bajo las especificaciones requeridas, sería clave. Por esa zona se transporta el 1 % de la carga de Colombia y un promedio de 5.000 vehículos por día. Entre sus especificaciones, tendría carriles de 3.45 metros, bermas de 1.80 metros, túneles de siete kilómetros, 20 kilómetros de puentes y la construcción de 65 kilómetros de nuevas vías adyacentes.
La ruta estuvo planeada hace tiempo, pero se vio retrasada por diez años, debido al fenómeno de La Niña de inicios de la década pasada, la cual no permitió que los procedimientos se llevaran a cabo y los documentos se retrasaran.
También fue uno de los puntos más importantes que se trató en una cumbre en el oriente antioqueño celebrada en diciembre de 2022.
Los trabajos incluirían 105 km de calzada sencilla, contemplando 6 km de túneles, 13 km de viaductos, dos variantes, 55 km de vías rehabilitadas y 35 km de vías a cielo abierto.
El proyecto de iniciativa privada, es decir que los riesgos corren por cuenta de las empresas que proponen su desarrollo y no cuenta con recursos públicos, fue liderado por las firmas Conconcreto, Castro Tcherassi, Procopal y Mario Alberto Huertas.
Sin embargo, a finales de marzo pasado, la ANI en una resolución rechazó el proyecto, porque “no cumple con los requisitos exigidos”, según el documento.
De 42 ítems que se analizan por parte de un evaluador externo de la ANI, en 31 la propuesta no cumplía los requerimientos.
Por ejemplo, en el componente técnico en estudios de tránsito y transporte no se aprobó por la ausencia de información actualizada sobre aforos vehiculares, velocidades y encuestas de origen – destino que son la base de la estructuración de los diferentes componentes del informe.
En el capítulo de túneles, los proponentes aseguraron que el estado de los existentes es adecuado y, por tanto, no requiere de intervenciones para mejoramiento y repotenciación. “Sin embargo, en el registro fotográfico y demás informaciones suministradas en el informe vigente a la fecha, muestran que existe deterioro generalizado del túnel y, por tanto, existe la oportunidad de realizar actividades de mejoramiento y/o repotenciación del túnel para mantenerlo durante el periodo de concesión en óptimas condiciones de estabilidad, seguridad y funcionalidad”, dice la resolución, por lo que se consideró en este punto el no cumplimiento ya que el contenido y la calidad de la información fue insuficiente. Además, el informe de túneles nuevos no cumplió con los alcances mínimos solicitados por la ANI en cuanto al cumplimiento de los términos de referencia.
Lo mismo sucedió con puentes, pontones y viaductos, considerando que se presentó información desactualizada proveniente de inspecciones de 2016 y que no pudieron ser aplicadas en su momento.
Además, la propuesta tampoco cumplió en temas como geología, pavimentos, componente de riesgos, diseño geométrico, análisis ambiental, social y predial, seguridad y señalización vial, y en el análisis y evaluación de riesgos financieros y económicos, entre otros.
La iniciativa privada surgió en abril de 2021 cuando fue presentada ante la ANI en el que empezaron cruces de comunicaciones para avanzar en la estructuración, etapa en la que la entidad dio concepto favorable. Sin embargo, en los procesos posteriores la propuesta no cumplió con muchas de las especificaciones técnicas lo que condujo a su rechazo.
El desarrollo de la obra también sería fundamental para darle un mejor mantenimiento a la vía entre El Santuario y Caño Alegre que tiene serias fallas que generan no solo dificultades en el tránsito sino también numerosos accidentes. De hecho, esta situación ha generado protestas de las habitantes de la zona ante el Invías y bloqueos de la carretera, el más reciente esta semana.