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En noviembre de este año llegará a Bogotá una delegación de más de 250 empresarios chinos, la más grande proveniente de ese país, interesados en explorar posibilidades de inversión en infraestructura, telecomunicaciones y recursos primarios.

Inversión

Inversionistas chinos exploran Colombia

Más de 250 empresarios de la China llegarán a finales de noviembre al país para estudiar posibilidades de inversión ¿Qué los atrae?

15 de mayo de 2009

Los buenos resultados económicos registrados por empresas chinas con presencia en Colombia como Huawei, Sinopec e Hidrochina, para mencionar algunas, están despertando el interés de nuevos inversionistas de ese país por traer capital a Colombia.

En noviembre de este año llegará a Bogotá una delegación de más de 250 empresarios chinos, la más grande proveniente de ese país, interesados en explorar posibilidades de inversión en infraestructura, telecomunicaciones y recursos primarios como madera, minerales, petróleo y biodiversidad, entre otros.

Dentro de los casos que llaman la atención de los inversionistas está el de Huawei que inició operaciones con menos de diez empleados en el año 2000 y hoy es una de las empresas más grandes del sector de telecomunicaciones, con una facturación que alcanzó $203.500 millones el año pasado y una nómina que supera los 400 empleados. Esta compañía les provee actualmente la plataforma tecnológica a todas las empresas de telefonía móvil celular en el país y tiene expectativas de crecer en el negocio de soluciones para el segmento corporativo.

Otras inversiones exitosas que aumentan la expectativa han sido Sinopec en el sector de petróleo y gas; Hidrochina en infraestructura y Beijing Capital International Airport Co. en el sector de transporte.

Pero las experiencias aún son pocas y de hecho el ministro de Comercio, Industria y Turismo, Luis Guillermo Plata, reconoce que "Colombia no se ha caracterizado por ser uno de los principales receptores de la inversión China en América Latina" y considera que hay potencial para revertir esa tendencia.

Estadísticas del Ministerio de Comercio indican que en los últimos 13 años Colombia ha recibido US$15 millones de inversión china, sin contar el sector petrolero. Esta cifra es baja, si se tiene en cuenta que solo en 2008 la Inversión Extranjera Directa en Colombia (IED) sumó US$10.564 millones.

En lo que respecta a la balanza comercial también hay desequilibrio, si se tiene en cuenta que el año pasado el país exportó US$450 millones a China, pero compró alrededor de US$4.500 millones.

¿Estamos preparados?

David Barriga, presidente de Asiabconsulting, sostiene que la decisión de China de hacer su III Cumbre Chino-Latinoamericana en el país es una muestra del interés que existe por invertir en Colombia, pero también es una oportunidad para que el país revise sus debilidades y comience a prepararse para atraer la inversión de diversos destinos.

En opinión del Ministro de Comercio "Colombia cuenta con un mercado ampliado por los acuerdos comerciales negociados y los que están en proceso, los incentivos tributarios legales y administrativos y los positivos resultados en materia de seguridad y estabilidad económica".

No obstante, Barriga percibe que al país le hace falta definir un norte y una estrategia clave para atraer nuevos inversores. "Las posibilidades de que Colombia diversifique su oferta y permita la llegada de inversionistas chinos está en la capacidad de competir en el exterior y de conocer la cultura china y sus necesidades en materia de inversión".

Para el país es claro que China se ha convertido en un importante proveedor de capitales en forma de IED. Según Proexport, entre 2003 y 2006, los flujos chinos de IED al exterior totalizaron US$30.000 millones. Esto equivale al 1,02% de la inversión total de los países desarrollados en este periodo. La expectativa para 2010 es alcanzar flujos salientes de alrededor de US$68.000 millones y Colombia está en el radar para ser receptora de estos recursos.

Lo que buscan los chinos

El primer secretario de la Embajada de China en Colombia, Wang Lianchang destaca que "Colombia es un país en el que a pesar de la crisis mundial el comercio no se ve tan afectado y tiene las condiciones necesarias para trabajar".

La lupa está puesta en la exploración de recursos primarios como minerales, madera y biodiversidad para el desarrollo de biotecnologías. Pero también hay un marcado interés en proyectos de infraestructura.

Los análisis realizados por Asiabconsulting plantean que el interés en estos sectores se debe a la necesidad de producir suficiente materia prima para cubrir las deficiencias que se tienen en China para la fabricación de algunos productos. "No hay que olvidar que América Latina es una fuente relevante de materias primas para el país asiático. Sin embargo, nuestra oferta exportable se centra en hierro, acero, cueros, flores y café, y no es suficiente para abastecer las necesidades de un país del tamaño de China".

Pero además de aumentar la oferta de materias primas, la inversión en Colombia significa una oportunidad para competir mejor en los mercados internacionales. Hoy, un contenedor despachado desde China puede tardar entre 45 y 50 días en llegar a un puerto de la Costa Oeste. Colombia, por su ubicación geográfica, le permitiría al país competir mejor en todos los mercados y es por esta razón que uno de los segmentos donde existe interés por invertir es en el de infraestructura, puertos y demás opciones que les permita garantizar que en el futuro podrán enviar más fácil y rápido sus mercancías hacia cualquier lugar del mundo.

Expectativa en Bogotá

Aunque hay oportunidades para la inversión china en todo el país, Bogotá ha sido la ciudad que más ha estado a la expectativa por atraer estos recursos.

Según Virgilio Barco, director de Invest in Bogotá, el 88% de la inversión directa de China se concentra en Bogotá y la expectativa durante la cumbre es seguir mostrando las oportunidades que ofrece la Capital para el desarrollo de los negocios con ese país con la idea de seguir incrementando ese porcentaje. Hoy, el 49% de la inversión china en Bogotá se concentra en transporte, el 38% en la industria, el 11% en comercio, el 1% en minería y un 1% más en servicios. No obstante, en este último renglón se prevé que hay posibilidades de incrementar la inversión y según los analistas en el tema, los chinos ya tienen detectadas las oportunidades.

La directora ejecutiva del Bureau de Convenciones y visitantes a Bogotá, Alexandra Torres, cuenta que la ciudad se viene preparando desde el año pasado para recibir a la delegación, mediante la capacitación de personal para atender a estos visitantes y para tenerles la oferta gastronómica que más se ajuste a sus necesidades. También se han contratado consultores para hacer las presentaciones en mandarín y especialistas en el idioma para que no haya ningún tipo de obstáculo en la comunicación con estos empresarios.

Nadie ha cuantificado el impacto que puede tener esta visita al país, lo que sí está claro es que se espera mostrar el potencial de Colombia y en especial de Bogotá para que la inversión sea cada vez más relevante y así mismo se aumenten las oportunidades de exportación hacia ese país.

Las relaciones con los países asiáticos, entre ellos China, se desarrollan mediante el acercamiento tanto a nivel gubernamental como empresarial, el avance en el conocimiento mutuo y la generación de confianza entre las partes. Por esta razón, encuentros como el que está previsto para finales de noviembre serán fundamentales para consolidar los pasos dados en los últimos dos años.

Se espera que la entrada en vigencia del acuerdo de promoción y protección de inversiones, que se encuentra en trámite ante el Congreso de la República, se constituya en un incentivo de confianza para que inversionistas de ese país se interesen en dirigir sus capitales y negocios en nuestro país. También se iniciará la negociación de un memorando de entendimiento que permita definir las condiciones y requisitos para que Colombia se convierta no solo en destino de negocios sino también de turismo. La oportunidad es grande, pero aún hay muchas tareas por hacer.