Elián González, 'El Balserito'

El 25 de noviembre de 1999 el intento de 13 balseros cubanos de llegar a las costas de la Florida terminó en tragedia. La precaria embarcación en la que viajaban naufragó. Sólo hubo dos sobrevivientes. Dos días después un pescador encontró a un niño de 5 años aferrado a un neumático. Se llamaba Elián González y después contaría que había sido salvado de los tiburones por los delfines. Su supervivencia fue calificada como un milagro y su historia le dio la vuelta al mundo. 'El Balserito', que perdió a su madre en el naufragio, fue acogido por unos parientes en la Florida y se convirtió en un símbolo del exilio. Durante siete meses fue objeto de disputa entre los exiliados, que querían quedarse con él y Juan González, su padre, quien lo quería a su lado de regreso en Cuba. Al final prevaleció el derecho de familia. El 6 de diciembre 'El Balserito' disfrutará de un nuevo cumpleaños acompañado de su papá, su madrastra, sus dos hermanos y sus compañeros de curso en la escuela primaria Marcelo Salado de la ciudad de Cárdenas. Que el pequeño sea considerado una especie de héroe nacional ha sido benéfico para este centro educativo porque ha recibido mayor atención del gobierno. Elián y su familia también son invitados con frecuencia a actos oficiales y tienen la oportunidad de pasar vacaciones en sitios frecuentados por turistas extranjeros. Por lo demás, les tienen prohibido el contacto con la prensa.