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Uno de los peores momentos en la vida de Mick Jagger ha sido la muerte de su novia. | Foto: AP.

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El trastorno mental de Mick Jagger

Tras muerte su novia, L'Wren Scott, se reveló información confidencial sobre la salud mental de la leyenda del rock.

14 de noviembre de 2014

El legendario líder de los Rolling Stones, de 71 años, está “profundamente disgustado” porque, durante un proceso judicial en Estados Unidos, se reveló que sufrió un “trastorno agudo de estrés traumático” a raíz de la muerte de su novia, L'Wren Scott, quien estuvo a su lado los últimos 13 años.

Tras el fallecimiento de la diseñadora, el luto obligó a Jagger a cancelar varios conciertos que tenía previstos. Según información de la agencia británica PA, la revelación acerca de los trastornos del cantante se hizo pública con motivo del pleito judicial que se dio con la empresa de seguros que debía responder por la cancelación de dichos conciertos.

Los Stones postergaron una gira por Australia y Nueva Zelanda y le reclamaron al seguro unos 12,7 millones de dólares. Ante la petición, la aseguradora se negó a pagar alegando que la muerte de Scott fue intencional y no accidental; su novia, de 49 años, se ahorcó el pasado 17 de marzo en un apartamento en Nueva York.

Como es usual en estos casos, la banda tenía una póliza para cubrir las eventuales pérdidas por alteración de fechas o cancelación de conciertos debido a una muerte inesperada de algún ser querido. Sin embargo, se especificó que la muerte no fue "repentina e imprevisible", por lo que no la cubriría la póliza.

Lo que empeoró el drama después de ese suceso es que se hubiera difundido información sin autorización sobre la condición mental y personal de Jagger.

Un portavoz de Mick Jagger dijo este viernes que el grupo y la aseguradora “han llegado a un acuerdo sobre la reclamación”, aunque se reiteró que aún están profundamente disgustados. “Información médica confidencial y otra información privada sobre miembros del grupo y sus familiares y allegados hayan entrado en el dominio público como resultado de la demanda interpuesta por los aseguradores”, señalaba el comunicado.

El grupo es consciente de que una vez hecha pública la información es mejor aceptar el suceso y no llorar sobre leche derramada. Sin embargo, “no habrá más comentarios sobre el asunto”, puntualizó el portavoz.