VENEZUELA

Maduro, el socialista que defiende la dolarización en Venezuela

Las marchas en la región proclaman el fracaso del modelo capitalista, pero en la Venezuela socialista el gobierno dio un paso atrás para acoger la divisa estadounidense. ¿Qué pasó?

2 de diciembre de 2019
El dólar se ha convertido en la moneda de uso cotidiano en Venezuela. En lo corrido de este año la devaluación del bolívar alcanza 97%. | Foto: fotografía_ Afp

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aplica al pie de la letra aquella sentencia según la cual "si no puedes con tu enemigo, únetele". Por eso dos décadas después de que su partido, el Socialista Unido de Venezuela, Psuv, llegó al poder para luchar contra ‘el imperialismo‘ yanqui y el dominio del dólar en su economía, comenzó a dar marcha atrás. En una entrevista televisada, el 17 de noviembre Maduro aseguró que el proceso de dolarización que vive la economía venezolana podría ser "lo mejor"para el sistema productivo en su recuperación.

Pocos hubieran anticipado que Maduro, uno de los principales promotores del ‘Socialismo del Siglo XXI‘, tendría que recoger sus palabras y reconocer la utilidad del principal símbolo del capitalismo.

Desde febrero de 2003, cuando el presidente Hugo Chávez adoptó el control de cambios, la divisa norteamericana había sufrido todo tipo de medidas restrictivas. Aunque dicho sea de paso, benefició a muchos dirigentes del régimen con los altos precios del petróleo.

Tras probar por más de una década todo tipo de decisiones para restringir el uso y acceso de los venezolanos a esta moneda, Maduro admitió hace dos semanas que "este proceso que ellos llaman dolarización puede ser útil para la recuperación y para liberar las fuerzas productivas del país y el funcionamiento de la economía". Agregó que, hasta cierto punto, el que hoy en Venezuela el dólar tenga un uso cotidiano "es una válvula de escape. Gracias a Dios existe". ¿Qué ha llevado a Maduro a echarse para atrás en materia de liberalización cambiaria?

Todo apunta a que el estado de postración de la economía habría producido este cambio. El economista y director de Datanálisis, José Vicente León, dijo en una entrevista al diario El Nacional que el gobierno de Maduro "ha creado todo un modelo ortodoxo de apertura económica; (pero) no tiene la capacidad de rescatar los equilibrios, porque no hay confianza en las variables clave de la economía; hay aislamiento, tiene sanciones y nadie cree en él ni en las autoridades monetarias".

No le falta razón. Para este año el FMI pronóstico que la inflación venezolana aumentará 200.000%, y completará su sexto año de recesión. Por eso, aunque la liberalización cambiaria surge como una opción para recuperar la economía, hay que ver si no es tarde para lograrlo y si la estructura económica creada por el Estado permitirá el libre juego de la oferta y la demanda.

Una historia de fracaso

Los anuncios de Maduro sobre el dólar llegan 16 años después de un control cambiario que fracasó. Este es el recorrido por las estrategias y modelos adoptadas.

1. Cadivi. En febrero de 2003, cuando el gobierno de Hugo Chávez decidió intervenir el mercado cambiario, creó la Comisión Nacional de Administración de Divisas como un ente autónomo. Tenía la función de controlar el libre acceso al dólar con un tipo de cambio fijo. En 2014 la remplazó el Cencoex, pero solo se liquidó en agosto de 2018.

2. Sitme. El Sistema de Transacciones con Títulos en Moneda Extranjera nació en 2010, controlado por el Banco Central de Venezuela (BCV). Se encargaba de compra y venta en bolívares de títulos de deuda pública denominados en dólares.

3. Sicad I. Este Sistema Complementario para la Adquisición de Divisas apareció en febrero de 2013 para reemplazar al Sitme. Su función era otorgar dólares a empresas que necesitaban importar.

4. Sicad II. La segunda parte del sistema se creó en 2014 para realizar operaciones en el mercado de divisas, tanto en efectivo como con títulos valores en divisas.

5. Simadi. En enero de 2015, y tras eliminar el Sicad I y II, nace el Sistema Marginal de Divisas, que permitió que las casas de bolsas volvieran a operar en el país y realizaran operaciones cambiarias de montos de US$300 para la compra, y sin límites para la venta.

6. Cencoex. En diciembre de 2013 crearon el Centro Nacional de Comercio Exterior para reemplazar a Cadivi en el control de divisas oficiales, cupos de viajeros en divisas, tarjetas de crédito o retiros en efectivo fuera del país.

7. Dipro. Esta tasa –Sistema de Divisas Protegidas– apareció en marzo de 2016 para manejar las importaciones prioritarias de alimentos y medicinas. Su objetivo era agilizar el mercado para frenar el desabastecimiento y operó hasta enero de 2018.

8. Dicom. La segunda tasa que también se creó en marzo de 2016 –que traduce Sistema de Divisas de Tipo de Cambio Complementario Flotante de Mercado– buscaba manejar subastas semanales con tasas de cambio fluctuantes y manejadas por el BCV.

9. Nuevo Dicom. Se lanzó en mayo de 2017 limitando la compra de dólares a personas naturales a US$2.000 al año y a las jurídicas hasta US$400.000 al año.

10. Canasta de monedas. Se creó en 2017 por iniciativa del presidente Maduro para eliminar el dólar de los pagos internacionales y permitir la libre convertibilidad del yuan chino, el rublo de Rusia, el euro, el yen japonés y la rupia de India.

11. Petro. Aprovechando la fiebre de las criptomonedas, en 2018 Maduro se lanzó con el blockchain o cadena de bloques para crear el petro, moneda respaldada por el precio de un barril de petróleo de la cesta de crudo venezolano.

12. Mesas de dinero. En mayo de 2019, el BCV autorizó la compra y venta de divisas en los bancos y puso fin al sistema Dicom. Fue el primer paso para flexibilizar el control cambiario.

13. Dolarización de facto. El presidente Maduro hizo el más reciente anuncio a mediados de noviembre, cuando reconoció que el dólar es una “válvula de escape” que mejorará el desempeño productivo.

El oro y el moro

En el mundo real venezolano escasean los alimentos y los recursos. Pero en el virtual, cientos se han convertido en ‘millonarios‘ cultivadores de oro en granjas digitales. En un reciente artículo The Economist relata la fiebre de oro virtual que ha llevado a muchos venezolanos a especializarse y pasar horas enteras en estos juegos en línea para extraer las preciadas monedas de oro en RuneScape, o de cristal en Tibia. Luego las canjean a otros jugadores por dinero real por medio de sitios web intermediarios. Esta práctica no es nueva y a finales de los noventa se practicó mucho en Corea del Sur y en los 2000 en China. Ahora los venezolanos dominan este negocio, que para algunos es ‘pirata‘, pero que les permiten ganar dólares que además no están gravados. Sin embargo, varios desarrolladores de juegos rechazan esta práctica y han empezado a reforzar sus equipos para controlar el fenómeno.