Motor de desarrollo

Sofía Arias y su visión de empresas con el bienestar en el centro

Desde el Valle del Cauca dirige dos compañías y resalta el bienestar como eje de su gestión, convencida de que la vida es frágil y la educación transforma futuros.

5 de septiembre de 2025, 6:07 p. m.
Esta caleña es profesional en Gobierno y Relaciones Internacionales, de la Universidad Externado de Colombia, y también se ha formado en campos que le permiten exprimir la vida al máximo: neurociencia, nutrición y literatura, por ejemplo.
Para ella, en el camino del emprendimiento es clave diversificar y atraer personas que tengan distintos conocimientos. | Foto: SEMANA

Tiene 37 años y siente que ha vivido todas las vidas. Haber enfrentado múltiples enfermedades e intervenciones médicas desarrolló en ella una filosofía de serenidad y estabilidad. Con base en ella dirige dos compañías en el Valle del Cauca, una en el sector agrícola –fundada por su padre en 1999–, cuyas riendas tomó hace ocho años, y otra de bienes raíces e inversiones financieras, que creó a comienzos de 2024.

Además de aportar a estos sectores en su región, busca el bienestar de sus trabajadores y de sus comunidades. “Las personas son más importantes que el dinero o el negocio –enfatiza–. Por eso nunca me ha importado perder plata si alguien más puede estar bien en mi empresa. No pretendo ser la empresaria más rica. Le doy mucha más relevancia al bienestar porque sé que la vida es frágil”.

Esta caleña es profesional en Gobierno y Relaciones Internacionales, de la Universidad Externado de Colombia, y también se ha formado en campos que le permiten exprimir la vida al máximo: neurociencia, nutrición y literatura, por ejemplo.

Antes de ser gerente de sus empresas, trabajó un lustro en SABMiller, multinacional sudafricana que fue dueña de la cervecera Bavaria. Sin embargo, siempre supo que su lugar estaba en la compañía que su papá fundó sobre dos principios: la transparencia y el valor de la palabra.

A estos pilares sumó el del bienestar. “Me fijo en los sueldos, en los espacios compartidos en familia y en los detalles para los días especiales”, comenta. De hecho, considera que, por salud mental, quienes tienen grandes responsabilidades deben fijar entre sus prioridades un tiempo de ocio.

Para ella, en el camino del emprendimiento es clave diversificar y atraer personas que tengan distintos conocimientos. “Me he rodeado de gente que me ha asesorado y me ha mostrado escenarios que desconocía. La inversión en el know how da sus frutos”.

Madre de una niña de 9 años, destaca el papel de las empresas como motor económico y social, especialmente por la influencia que tienen sobre un aspecto básico: la educación. “Si uno puede dar trabajo a algunas cabezas de familia, estas van a poder pagar un mejor colegio para sus hijos, lo que transformará su futuro inmediato y sus opciones para salir del círculo de pobreza. Pienso que ahí está el cambio”. Lo sabe de primera mano, porque su padre le mostró desde pequeña un mundo de posibilidades.