Home

Mundo

Artículo

CLIMA

Jimena, “más débil” pero aún peligrosa

El huracán Jimena comenzó a perder fuerza el martes mientras avanzaba hacia el estado mexicano de Baja California Sur hasta convertirse en un ciclón categoría tres, aunque según el Servicio Meteorológico Mexicano mantiene su alta peligrosidad.

BBC MUNDO
2 de septiembre de 2009

Según los últimos datos disponibles Jimena se encuentra a 165 kilómetros al suroeste de Cabo San Lucas y a 200 kilómetros al suroeste de Cabo San José.
 
El huracán avanza con vientos sostenidos de 205 kilómetros por hora y rachas de hasta 250, con un potencial poder destructivo mucho menor que el del lunes cuando llegó a categoría cinco, la máxima en la escala Saffir-Simpson.

Los meteorólogos prevén que el huracán toque tierra este miércoles en una categoría dos o tres, un pronóstico mucho más alentador que las primeras proyecciones.

"Parece que Dios nos quiere mucho. La emergencia no ha pasado, aunque hay un menor nivel de riesgo porque el huracán modificó su rumbo y bajó su intensidad, pero hemos mantenido las medidas de precaución", le dijo a BBC Mundo José Gajón, director de Protección Civil de Baja California Sur.

Gajón estimó que serán evacuadas un total de cuatro mil personas y que la zona de mayor peligro hasta hora es el municipio de Mulegé, al norte de Los Cabos.

Alta peligrosidad
La alerta naranja de alta peligrosidad permanece en el balneario de Los Cabos donde gran parte de la población que habita zonas de alto riesgo ha sido evacuada.

En total las autoridades trasladaron a refugios temporales a más de dos mil personas, mientras que miles de turistas decidieron abandonar voluntariamente la zona o buscaron refugio en sitios seguros habilitados por la industria hotelera.

Muchos residentes protegían sus casas con sacos de arena e intentaban sellar las ventanas de sus viviendas para enfrentar el fenómeno climático.

Pese a los esfuerzos de prevención, algunos pobladores rechazaron abandonar sus viviendas por temor a perder sus enseres en manos de oportunistas.

El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos también informó que pese al descenso de Jimena en la escala de ciclones, aún mantiene un índice de peligrosidad.
"Se espera un gradual debilitamiento para el miércoles, aunque está previsto que Jimena permanezca como un huracán mayor hasta que impacte tierra".

Estado de emergencia
El gobierno declaró este martes estado de emergencia en los municipios de Los Cabos, La Paz y Comondú para poner en práctica un plan de ayuda inmediata a quienes resulten damnificados.

Esta declaración de emergencia permitirá al estado contar con recursos federales para hacer frente a la situación, según informó la Secretaría de Gobernación.

La Comisión Federal de Electricidad, por su parte, envió a la zona de riesgo a cerca de mil electricistas, 280 vehículos, dos helicópteros, dos aviones ultraligeros y 50 plantas de energía eléctrica de emergencia.

Efectivos del Ejército y la Marina colaboran en las tareas de evacuación de personas y en la implementación de medidas preventivas y de vigilancia.

Algunas de las personas evacuadas en albergues le dijeron a BBC Mundo que los efectos del huracán ya se están haciendo sentir.

"Corre tanto viento que aquí se están levantando las láminas de los techos", señaló Omar Barrios de la colonia Tierra y Libertad de Cabo San Lucas.

Muchos temen por su familia y el destino de sus viviendas. "Da miedo porque dicen que se viene fuerte y nosotros nunca habíamos vivido algo así", dijo Mireya Colorado poco antes de ser trasladada a un refugio junto a sus dos hijos.