"Sería inaceptable una nueva Cumbre sin la asistencia de Cuba": Santos

El presidente Juan Manuel Santos, en su intervención como jefe de Estado anfitrión, manifestó en la apertura de la VI Cumbre de las Américas que América Latina ya "no es fuente de problemas, sino de soluciones".
 
Para el mandatario colombiano, los presidentes asistentes a la Cumbre no vinieron a comentar la realidad, sino "a transformarla". Una realidad  "donde el paradigma sean los derechos de la gente".
 
En un discurso en el que llamó a la cooperación y el pragmatismo con principios, Santos dijo a los representantes de los países de la región que era la hora del diálogo y de acabar con los anacronismos ideológicos y viejos mitos. "Al tender puentes todo es posible", dijo.
 
La declaración de Santos fue más allá al decir que era la hora de que Cuba hiciera parte de las organizaciones del hemisferio y que esta era la forma de abrir el camino. "No podemos ser indiferentes a un proceso de cambio al interior de Cuba", dijo el mandatario.
 
Contó que gracias a esas alianzas entre países se han resuelto desafíos que parecían irreversibles, como el restablecimiento de las relaciones bilaterales entre Colombia y Venezuela y el orden constitucional en Honduras.
 
Conminó, entonces, a los mandatariod asistentes a trabajar en función de un espíritu de cooperación para contribuir con la superación de la pobreza en Haití y el aislamiento de Cuba: "No podemos permitirnos asistir a una próxima cumbre con un Haití frustrado y sin una Cuba presente", enfatizó.
 
Insistió en que la indiferencia ante el aislamiento y el embargo económico a Cuba no facilitan los cambios que deben gestarse en el interior de ese país: "Es un anacronismo que nos mantiene atados a un esquema de guerra fría que fue superado hace ya varias décadas. Para cambiar eso –repitió- debemos tender puentes".
 
Santos también se mostró dispuesto a colaborar con los países de Centroamérica afectados por el crimen organizado, y habló de la lucha que está dando su gobierno por devolverle la paz a Colombia. "Estando más unidos seremos una mejor América", concluyó.
 
La declaración también habló de la lucha antidroga que mantienen tanto los países consumidores como los productores.
 
Pidió nuevas formulas aunque reconoció que la Cumbre, "no va a resolver este tema, pero puede ser el punto de partida de una discusión que hemos aplazado por mucho tiempo". 

Santos abogó en su discurso por que las naciones del continente no lleguen "a la próxima cumbre sin las victorias decisivas que enuncien que vamos a liberar a los pueblos centroamericanos de las garras de la violencia" y pidió hacer una revisión de la política de lucha contra las drogas.

"Debe ser una discusión abierta, sin sesgos ideológicos o políticos, rigurosa y basada en la evidencia sobre los costos y beneficios de cada alternativa. Por supuesto, esa discusión no puede servir de excusa para dejar de hacer lo que todos sabemos que es indispensable: combatir con toda la firmeza y sin ningún descanso al crimen organizado. Y debe ser una discusión centrada en la gente, en las víctimas de este negocio", puntualizó.